Endesa, en el marco del proyecto europeo Green eMotion, ha puesto en marcha un punto de recarga que lleva incorporado una batería procedente de un vehículo eléctrico, un novedoso uso que será clave en el futuro del desarrollo de la movilidad eléctrica. El objetivo es que las baterías, una vez agotada su función en un vehículo eléctrico, puedan seguir siendo utilizadas con usos menos intensivos antes de ser recicladas, como, por ejemplo, el almacenamiento energético.
La batería que ha utilizado Endesa procede de un vehículo eléctrico Renault y se ha instalado en un punto de recarga rápida de Endesa, de 50 kW de potencia, que permite cargar el 80% de la batería del vehículo en 15 minutos. El punto está situado en las proximidades de la Empresa de Transporte de Málaga, una de las dos ciudades españolas demostrativas de Green eMotion, un proyecto que Endesa coordina en España. En 2020 se espera que haya decenas de miles de baterías disponibles para una segunda vida útil.
El Ayuntamiento de Málaga, socio del proyecto y promotor de la movilidad eléctrica como elemento clave en el desarrollo de ciudades inteligentes, ha participado en la construcción del punto de recarga y quiere usarlo como campo de pruebas para autobuses eléctricos. En concreto, cargará el autobús que cubrirá la línea 16 de la ciudad de Málaga. Este vehículo será también el que se utilizará en el proyecto Vitoria, una iniciativa de Endesa para desarrollar el primer carril de carga eléctrica por inducción dinámica de España. Esta tecnología permite que el vehículo eléctrico vaya recargando su batería en movimiento y sin necesidad de cables.
El proyecto de Green eMotion tiene ventajas para los distintos actores implicados: para el cliente final doméstico, el propietario de un vehículo eléctrico, supone una reducción del coste total de la batería dado que el valor residual minorará los costes de reciclaje; y para los operadores de infraestructura de recarga, formará parte de la cartera de soluciones de puntos de recarga que se pueda ofrecer a los clientes, con un menor coste.
Un ejemplo podría ser el gestor de un parking. Por un lado, compraría el o los puntos de recarga con mejor precio y, al tener almacenamiento incorporado en los puntos de recarga, podría reducir los costes de operación del parking. Podría conseguirlo, por ejemplo, reduciendo la potencia contratada al reducir los picos de consumo; almacenando la energía en horas valle y descargándola en horas punta; facilitando la integración de energías renovables; o aumentando la capacidad de uso de la instalación, entre otras cosas.