Bosch, BMW y Vattenfall han puesto en marcha el proyecto Second Life Batteries para impulsar el progreso de la movilidad eléctrica y el almacenamiento energético como elementos capitales hacia formas alternativas de energía. Consiste en la la interconexión de las baterías usadas procedentes de vehículos eléctricos para formar un sistema de almacenamiento de energía a gran escala en Hamburgo. Su energía está disponible en cuestión de segundos y puede ayudar a mantener la red eléctrica estable.
BMW suministra las baterías de sus modelos de coches eléctricos ActiveE e i3, mientras que Vattenfall, empresa sueca de suministro de energía, ha accedido a operar el sistema de almacenamiento masivo ‘in situ’ por un período de diez años. Bosch, por su parte, se encarga de la integración de las baterías y la gestión del sistema. La solución de almacenamiento formará parte de una central eléctrica virtual de Vattenfall ya existente. Esto permitirá a los socios combinar varios pequeños sistemas de generación de energía descentralizados para comercializarlos como una central eléctrica compartida.
Las baterías de iones de litio aún mantienen una elevada capacidad de almacenamiento de energía al final de su ciclo de vida útil en los vehículos eléctricos. Como resultado de ello, todavía son muy valiosas y pueden ser utilizadas de forma muy eficaz como un ‘buffer’ estacionario de almacenamiento durante muchos años más. El proyecto permite a los tres socios adquirir nuevos conocimientos sobre las posibles áreas de aplicación de este tipo de baterías, su respuesta ante el envejecimiento, y su capacidad de almacenamiento. Un algoritmo de gestión de Bosch garantiza la máxima vida útil y rendimiento de las baterías, así como otros beneficios.
La compañía ya ha llevado a cabo sus primeras experiencias en este campo. En la localidad alemana de Braderup, cerca de la isla de Sylt, Bosch ha construido uno sistema de almacenamiento de energía para almacenar temporalmente, si fuera necesario, la energía generada por un parque eólico. Para ello, la compañía ha conectado miles de pequeñas baterías de iones de litio para formar una red a gran escala. Asimismo, en Kelsterbach, cerca de Frankfurt, ha instalado un sistema de almacenamiento de iones de litio similar en un complejo de viviendas. Este conocimiento también está marcando una diferencia en el proyecto Second Life Batteries.