Cumpliendo con la prioridad descrita en las directrices políticas de Jean-Claude Juncker, Presidente de la Comisión Europea, dicho organismo ha presentado su estrategia para conseguir una Unión Energética con una política climática con miras de futuro.
La energía se usa para calentar o enfriar edificios y hogares, servicios de transporte y fortalecer la economía. Pero, con infraestructuras obsoletas, mercados poco integrados y políticas descoordinadas, los consumidores europeos, dueños de viviendas y negocios no se benefician del aumento en las posibilidades de elección ni de la bajada en el precio de la energía.
Para la Comisión, es hora de completar el mercado energético en Europa
, así, con el objetivo de cumplir con las medidas recogidas en las directrices de Juncker, el Colegio de Comisarios ha aprobado esta estrategia que recoge las siguientes directrices:
- Un marco estratégico para una Unión Energética Resiliente, con una política de cambio climático con vistas al futuro: En él se establecen, en cinco dimensiones políticas interrelacionadas, los objetivos para la unión energética y los pasos específicos que tendrá que dar la Comisión Juncker para conseguirlos. Incluyendo una nueva legislación para rediseñar y revisar el mercado de la electricidad; asegurando una mayor transparencia en los contratos de gas; desarrollando sustancialmente cooperaciones regionales como un paso importante hacia un mercado integrado, con un fuerte marco regulatorio; nueva legislación para asegurar el suministro de electricidad y gas; incremento de los fondos de la UE para la eficiencia energética; un nuevo pack de energías renovables enfocado en la investigación y desarrollo de estrategias energéticas o un reporte anual sobre el ‘Estado del Arte de la Unión Energética’, entre otras.
- Comunicación interconectada, describiendo las medidas necesarias para alcanzar el objetivo del 10% de electricidad interconectada para 2020, que es el mínimo necesario para que la electricidad fluya y pueda comercializarse entre los Estados Miembros. Esto mostrará qué países han alcanzado el objetivo actualmente y qué proyectos son necesarios para cerrar la brecha de aquí a 2020.
- Una Comunicación que establezca la visión para el acuerdo global por el clima que tendrá lugar en diciembre en París. La visión es la de un acuerdo global transparente, dinámico y legalmente vinculante con compromisos justos y ambiciosos de todas las partes. La Comunicación también trasladará la decisión tomada en la Cumbre Europea en octubre de 2015, a las propuestas de la UE para el objetivo de reducción de emisiones del nuevo acuerdo.
- El Colegio también ha decidido que la Comisión deberá enviar una señal fuerte a los Estados Miembros para llevar a cabo reformas estructurales y continuar consolidando sus finanzas públicas. En un resumen de prensa, el Vicepresidente Valdis Dombrovskis y el Comisario Perre Moscovici, señalaron sus recomendaciones y qué países están afectados.
La unión energética significa, en particular:
Claúsula de solidaridad: reducir la dependencia de proveedores individuales y confiar plenamente en sus vecinos, especialmente cuando se enfrentan a cortes en el suministro de energía. Con mayor transparencia entre los países de la UE que realizan negocios de compra de energía o gas de otros países de fuera de la Unión.
La energía fluye como si se tratara de una quinta libertad: la de la libre circulación de la energía a través de las fronteras, la aplicación estricta de normas actuales en áreas como la separación de la energía y la independencia regulatoria, tomando acciones legales si fuera necesario. Rediseñar el mercado eléctrico, para estar más interconectados, tener más energías renovables y más adaptables. Revisar seriamente las intervenciones estatales en el mercado interno y eliminar gradualmente las subvenciones que puedan ser perjudiciales para el medio ambiente.
La eficiencia energética en primer lugar: repensar fundamentalmente la eficiencia energética y tratarla como fuente de energía en sí misma para que pueda competir en igualdad de condiciones con capacidad de generación.
Transición a una economía baja en carbono pensada para durar en el tiempo: asegurar que la energía producida localmente, incluyendo la producida a partir de renovables, puede ser absorbida con facilidad y eficacia por la red; promover el liderazgo tecnológico de la UE, mediante el desarrollo de la próxima generación de tecnologías para las energías renovables y convirtiéndose en líderes en movilidad eléctrica, mientras que las empresas europeas aumentan sus exportaciones y compiten a nivel mundial.
En la Unión Energética los ciudadanos son el centro, los precios que pagan deben ser asumibles y competitivos, la energía debe ser segura y sostenible, con mayor competencia y opciones para cada consumidor.