La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha presentado su Informe Anual del sector fotovoltaico en el que destaca el avance del autoconsumo y los sistemas aislados de la red sin primas en España, que supusieron el 79% de la nueva potencia fotovoltaica instalada el año pasado en el país. Unos datos positivos que se muestran sin embargo escasos si se comparan los 22MW de nueva fotovoltaica instalada en España con los 40.000 nuevos GW instalados en el mundo en 2014.
El informe pone de manifiesto que las reformas emprendidas por el Gobierno con el cambio retroactivo del sistema de primas al de ‘costes estándares’ no está garantizando la rentabilidad de las inversiones, como aseguraba y está desincentivando la productividad de las instalaciones.
La Ley 24/2013 puesta en marcha cambiaba con aplicación retroactiva las condiciones establecidas en las anteriores normativas bajo las cuales se realizaron las inversiones actuales en energía fotovoltaica. El Gobierno justificó unos recortes que alcanzaban hasta el 55% menos de ingresos de los previstos para los productores fotovoltaicos, con una garantía de ‘rentabilidad razonable’ del 7,5% para los inversores.
El año pasado se produjo el cierre de numerosas empresas, la pérdida de 2.500 puestos de trabajo y la reducción de la producción fotovoltaica debido, según UNEF, a la política energética del Gobierno y, en concreto, de gestión de las energías renovables y la fotovoltaica en particular. Unos cambios retroactivos que han supuesto una ruptura de seguridad jurídica que ha situado a España en el país más demandado de Europa ante el CIADI y con más de 400 recursos abiertos en los tribunales nacionales.
España, referente en I+D fotovoltaico
De las patentes españolas de energías renovables, la solar es la que más patentes ha generado en el periodo 2000-2014, con un 44,44% de registros. Según datos de FOTOPLAT, la plataforma tecnológica para el fomento del I+D fotovoltaico en España, que ha colaborado con el Informe Anual de UNEF, la I+D española está despuntando a nivel internacional en la integración fotovoltaica en la edificación, en la concentración fotovoltaica y en desarrollos relacionados con células solares basadas en perovskitas. Los nuevos mercados para el desarrollo del I+D fotovoltaico han surgido fundamentalmente en torno al concepto de autoconsumo y los sistemas aislados.
La colaboración público privada ha situado la actividad investigadora en energía solar fotovoltaica entre las más productivas de España. Así, el programa nacional INNPACTO en el periodo 2011-2013 muestra que, sobre un total de 193 proyectos aprobados, 24 de ellos correspondieron a fotovoltaica y, de los 329,4 millones de euros de ayudas totales, 45,6 millones de euros (13,8%) se aplicaron a la fotovoltaica. Por otro lado, el programa europeo Horizonte 2020 ha financiado cuatro proyectos fotovoltaicos con una inversión de 16,83 millones de euros.