La Generalitat, Endesa e Infosa, responsable de la explotación de las Salinas de la Trinitat, situadas en el Parque Natural del Delta del Ebro, en Sant Carles de la Ràpita (Montsià), han inicado la tercera fase del proyecto que permitirá soterrar por mar la línea eléctrica del Trabucador. Esta es la parte más espectacular de la obra, ya que se sumergirán 4,6 kilómetros de cableado (que equivalen a casi 52 toneladas) dentro del mar, los cuales se enterrarán a un metro de profundidad en la bahía dels Alfacs mediante el método menos invasivo para el medio acuático, el llamado ‘postrenching’, con bomba de succión.
Antes de realizar la actuación marítima se han llevado a cabo trabajos previos de barimetría, geofísica y estudios medioambientales. Así, se ha examinado la profundidad del agua, las pendientes, los tipos de sedimentos y los obstáculos. De hecho, fue en estos estudios donde se decidió que el tendido del cable en barco no se podría hacer en la zona que toca a las costas por la poca profundidad del lecho marino y que la harían manualmente los buceadores. Además, una vez finalizada esta fase se hará un seguimiento del cableado para asegurar que sigue enterrado, en su totalidad, a un metro o más de profundidad.
Está previsto que el soterramiento por mar de la línea finalice a principios de marzo, por lo que una vez la línea entre en servicio, y después de un periodo de pruebas, la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno retirará la línea aérea de media tensión a 25 kV que actualmente alimenta las Salinas de la Trinitat.
La actuación supondrá una mejora ambiental y paisajística de la barra del Trabucador, un istmo que ha sido declarado de especial valor ecológico tanto por la Administración municipal como por la autonómica. Se sumergirán unas 52 toneladas de cable hasta el fondo marino de la bahía de los Alfacs, que serán enterrados y permitirán eliminar la actual línea aérea.