El Grupo Red Eléctrica ha obtenido durante el ejercicio 2015 un beneficio en términos homogéneos de 606 millones de euros, un 8,3% superior al del 2014, y un 15,6% inferior si se consideran las partidas no recurrentes incluidas en el cuarto trimestre del año pasado, como el acuerdo alcanzado con el Estado Plurinacional de Bolivia sobre la indemnización de Transportadora de Electricidad (TDE) y el impacto de la reforma fiscal. Estos resultados son producto, fundamentalmente, del mayor volumen de activos y de las mejoras en eficiencia operativa y financiera.
El Consejo de Administración ha acordado proponer a la Junta General de Accionistas un dividendo de 3,21 euros por acción correspondiente al ejercicio 2015, un 7% más que el año anterior; dado que las inversiones del Grupo han ascendido a 447,8 millones de euros. De ellos, 410,7 millones corresponden al desarrollo de la red de transporte en España y 12 millones al almacenamiento energético en Canarias. No se incluye la adquisición del 50% de la sociedad chilena Transmisora Eléctrica del Norte (TEN), por importe de 218 millones de dólares y cuyo desembolso se ha realizado en el 2016.
En 2015, se ha iniciado la operación comercial de la interconexión España-Francia y se ha avanzado en el cable de interconexión entre Mallorca e Ibiza. El primero de los cables entró en operación comercial en junio del 2015 y está prevista la entrada en servicio del segundo en abril de este año.
Con todo ello, el resultado financiero ha sido de 159,3 millones de euros. Los gastos financieros por intereses han sido muy similares a los del 2014, ya que el menor coste medio de la deuda se ha compensado, casi en su totalidad, con el mayor saldo medio de la misma derivado de la operación con ADIF a finales del 2014.