Farolas LED que funcionan con energía fotovoltaica

Desde hace un par de años, numerosos municipios españoles apuestan cada vez más por renovar su iluminación urbana instalando luminarias con tecnología LED con el fin de conseguir un mayor ahorro energético, además de ofrecer una luz de mayor calidad, reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera así como los costes de alumbrado de la localidad.

Empresas como Solarpen, fabricante andaluz de farolas fotovoltaicas y eólicas LED, que desarrolla su propio I+D+i en colaboración con un grupo de investigadores de la Fundación FIDETIA (Universidad de Sevilla, Escuela Superior de Ingenieros Electrónicos), ha desplegado en el municipio sevillano San Juan de Aznalfarache farolas solares en los parques de la localidad.

Esta empresa sevillana ya cuenta con experiencia en este tipo de proyectos. En 2011, Arahal (Sevilla) apostó por la eficiencia energética y la iluminación sostenible, por lo que instaló este tipo de farolas autónomas fotovoltaicas LED en un tramo de carretera de dos kilómetros, siendo en aquel momento la carretera más larga de España iluminada por farolas solares. Esta actuación supuso un ahorro para el municipio de 445.000 euros entre consumo eléctrico, mantenimiento y obras de infraestructura. Como efectos medioambientales, redujo las emisiones de CO2 a la atmosfera en 8.672 Kg.

En este caso, para San Juan de Aznalfarache, los entornos escogidos para el despliegue de farolas han sido los parques municipales. Solarpen ha desarrollado específicamente un modelo de farola para este proyecto, en el que ha participado muy activamente la cooperativa local OSSET, S.C.C (bajo el entorno del Círculo Empresarial Intersectorial de Empresas de Economía Social de Servicios Avanzados e Innovación de Andalucía, CLIES) y encargado de instalarlas. Por este motivo, el fabricante español ha bautizado este modelo con el nombre de OSSET, en reconocimiento a su participación, además de ser el nombre tartesio que recibió la antigua localidad sevillana.

Concretamente en Andalucía, existe una normativa que obliga a las instalaciones fotovoltaicas aisladas a estar dotadas con al menos 5 días de autonomía, ya que es impensable que una vía pública se quede a oscuras porque la farola se quede sin energía eléctrica. Según la estadística que se maneja en Andalucía, por debajo del paralelo 37N, con 5 días de autonomía se cubre el máximo tiempo que, estadísticamente, puede estar la climatología en condiciones de no cargar la farola.

Para situaciones por encima del paralelo 37N, la marca SOLARPEN tiene otras soluciones que combinan la tecnología fotovoltaica con la tecnología minieólica, lo que le da autonomía suficiente para no apagarse en ninguna circunstancia, porque, como vulgarmente se dice Cuando no hay Sol, suele saltar el viento. Por otra parte, las farolas autónomas son muy competitivas en cuanto a la inversión a realizar ya que cuando no existe infraestructura eléctrica en la zona a iluminar, ahorra enormes costes de obra civil. Las farolas fotovoltaicas y eólicas suponen un avance tecnológico en la iluminación inteligente, ya que estas poseen una electrónica que les permite ajustar la intensidad a las necesidades de la vía pública iluminada.

Despliegue de las farolas autónomas

Las primeras 10 unidades han sido instaladas en el Parque de ‘Los Pitufos’, iluminado una zona que une el centro de la localidad con el Polideportivo. Las siguientes unidades hasta completar 27 se van a instalar en los parques que rodean la Barriada del Monumento, donde se encuentran los principales restos arqueológicos de la antigua ciudad tartesia de OSSET. El Ayuntamiento, en su política de contribuir a reducir las emisiones de CO2 a la atmosfera y de optimizar los recursos energéticos de la localidad planea continuar con este tipo de actuaciones.

Las farolas de la marca SOLARPEN se complementan con una sería de detalles que las hace únicas, como por ejemplo que van personalizadas con el nombre del cliente, fresado en sus componentes, lo que disuade de su robo; y estéticamente, las farolas viales fotovoltaicas y eólicas de más de 7 m de altura, se les instala el escudo o logotipo del cliente en una banderola que se ubica por debajo del brazo de la luminaria, lo que le da una apariencia muy elegante.

 
 
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