Francia ha creado un árbol artificial, denominado ‘NewWind‘, que mediante pequeños aerogeneradores con forma de hojas giratorias convierte las brisas de viento en electricidad. De esta manera llega a proporcionar más del 80% de la potencia eléctrica de un hogar francés o bien, suministrar en un año la electricidad que necesita un coche eléctrico para recorrer 15.00o kilómetros.
Sus hojas, llamadas ‘Aeroleaf’, comienzan a producir electricidad con vientos inferiores a los dos metros por segundo independientemente de dónde venga el aire, y llegan a producir 100 KW de electricidad cuando la velocidad del viento supera los 15 metros por segundo.
La clave de este desarrollo está en la potencia conseguida como conjunto, ya que según el directivo de NewWind, Jérôme Michaud-Larivière su objetivo es fomentar las energías renovables, concretamente la energía eólica, reduciendo su impacto en el paisaje.