Si se liberara el potencial energético renovable de las islas Filipinas, se podría ayudar a alcanzar la creciente demanda energética, se dedicaría al desarrollo de tecnologías de bajo carbono y abordaría el cambio climático, según un nuevo informe de IRENA Renewables Readiness Assessment: Philippines (Evaluación de la Preparación para las Renovables: Filipinas), que identifica las acciones clave para el país para acelerar el desarrollo de energías renovables.
En 2011, las islas Filipinas establecieron el objetivo ambicioso de un suministro energético de 15,3 GW generado por energías renovables para 2030, cerca del triple del registrado en 2010 con 5.438 MW. Además, la Asociación de Países del Sureste Asiático, a la que pertenece Filipinas, ha establecido el objetivo regional de renovables en un 23% para 2025.
El informe elaborado por IRENA examina holísticamente el sector energético y propone una serie de opciones y medidas concretas para acelerar el desarrollo de renovables y fortalecer las políticas de energías renovables del país así como el marco regulatorio e institucional. Estas recomendaciones son:
- Incrementar la conciencia pública de soluciones de energías renovables para asegurar el compromiso político sostenible.
- Evaluar la red de infraestructura del país para permitir el desarrollo de planes y formación proactivos de energía.
- Examinar la capacidad institucional en el sector energético renovable para identificar las habilidades y las deficiencias de recursos y permitir programas más eficaces de creación.
- Estudio del potencial de electrificación renovable a través de mini y microrredes, y desarrollar políticas y marcos regulatorios para inversiones atractivas así como compromiso con el sector privado.