En España en 2017 se instalaron 135 MW de nueva potencia fotovoltaica, cifra que representa un crecimiento del 145% respecto a 2016, según revela el informe anual elaborado por UNEF. Estos datos ponen de manifiesto un cambio de rumbo en la evolución del sector fotovoltaico.
Para calcular una estimación de la potencia total instalada el año pasado en España, UNEF ha tenido en cuenta tanto la potencia conectada a red, tanto de generación centralizada y de autoconsumo, como de potencia aislada.
Cambio de tendencia
Aunque este crecimiento del 145% en instalación de potencia fotovoltaica representa el mayor nivel desde el año 2012, el informe incide en que los 135 MW aún se encuentran muy lejos de los 2.718 MW instalados en 2008 y lejos también del nivel de los países del entorno. En Europa, España ocupa el quinto puesto, después de Francia, en potencia fotovoltaica acumulada, según Datos de la Agencia Internacional de la Energía.
No obstante, el informe aclara que a 31 de marzo de 2018 existían en torno a 30 GW de potencia solar fotovoltaica en tramitación, de la que se espera que un alto porcentaje se traduzca en potencia instalada en funcionamiento en los próximos años.
Son varias las razones que determinan este cambio de tendencia en la evolución del sector fotovoltaico. Sin duda, una de las más influyentes es la adjudicación de 3,9 GW de nueva potencia en la subasta celebrada en julio de 2017.
El informe menciona otros factores clave para este cambio de rumbo, como el aumento en la competitividad tecnológica del sector y el progresivo abaratamiento de los costes de producción, así como los objetivos de penetración de las energías renovables en el mix energético definidos en el marco legal de la Unión europea, hoy materializados en la nueva Directiva europea de Energía Renovable.
Y todo ello sin olvidar la creciente concienciación respecto al desarrollo del autoconsumo como medida eficaz e indiscutible para el ahorro energético y la reducción de emisiones CO2.
En términos de generación, la energía fotovoltaica se erige en 2017 como la tercera fuente con mayor peso en el mix energético con un 9,9% de la generación renovable total, por detrás de la eólica y la hidráulica, que representaron el 56,7% y el 21,7% del total, respectivamente, según los datos del operador del mercado, Red Eléctrica de España (REE).
Datos por comunidades autónomas
En términos de potencia instalada, cinco regiones aglutinan el 70% de la capacidad instalada nacional. Castilla-La Mancha y Andalucía se erigen como las principales potencias fotovoltaicas nacionales con 925 y 878 MW instalados, respectivamente. Les siguen Extremadura, Castilla y León y Murcia.
Por su parte, en términos de generación, Castilla-La Mancha y Andalucía vuelven a liderar el ránking, 1.742 y 1.579 GWh, respectivamente. Extremadura, en este caso, les sigue muy de cerca con una generación en 2017 de 1.118 GWh.
Las cinco comunidades autónomas antes resaltadas en términos de potencias instalada vuelven a ocupar los cinco primeros puestos en términos de generación, produciendo en su conjunto casi el 73% del total de energía fotovoltaica generada.
Datos macroeconómicos
El análisis de los datos macroeconómicos en 2017 muestra que la contribución del sector fotovoltaico al PIB ha aumentado sustancialmente respecto a 2016, situándose en torno al 0,3% (3.935 millones de euros en 2017 y 3.781 millones de euros en 2016). Las exportaciones del sector fotovoltaico alcanzan la cifra de 938 millones de euros en 2017, frente a los 919 millones de euros del año anterior.
El informe anual de UNEF estima que más de 70 empresas asociadas tienen actividad en 72 países. Asimismo, la huella total de empleo arroja la cifra de más de 19.000 puestos de trabajo en 2017 (18.377 trabajadores en 2016); el gasto de las empresas españolas del sector en I+D+i fue de 60 millones de euros en 2016 y en 2017 un 2,5% más, lo que supone un 1,6% de su facturación, el doble de la media española situado en torno al 0,89%; y su actividad supone una reducción de emisiones estimadas en 3.631 ktCo2.
Perspectivas para 2019
De cara al próximo año, UNEF espera que la reactivación del sector a nivel nacional gracias al desarrollo del autoconsumo y del desarrollo de nuevos proyectos a gran escala, se traduzca en una reinversión en el capital y el potencial tecnológico español en materia de I+D+i del sector solar fotovoltaico.