Egipto tiene potencial para generar el 53% de su electricidad a partir de fuentes renovables en 2030, según el último informe de la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA, por sus iniciales en inglés). Dicho estudio ha sido presentado durante la inauguración de la Conferencia de Energía Renovable que se celebra en El Cairo desde el 9 hasta el 11 de octubre.
El informe deIRENA estima en unos 900 millones de euros anuales el ahorro económico derivado de alcanzar dicho potencial energético en Egipto.
Egipto apunta a obtener el 20% de su electricidad de fuentes renovables para el año 2022, aumentando al 42% para el 2035 mientras trabaja para satisfacer la creciente demanda de energía. La capacidad total instalada actualmente es de alrededor de 3,9 GW, gran parte de la cual proviene de la energía hidroeléctrica.
El país cuenta con una Estrategia Integrada de Energía Sostenible 2035 que apoya el desarrollo de una economía diversificada, competitiva y equilibrada en el marco del desarrollo sostenible. Según declaraciones de Mohamed Shaker, ministro de Electricidad y Energía Renovable: «Con la energía renovable en el centro de esta estrategia, el papel de IRENA en la identificación de nuestro potencial y el asesoramiento sobre los pasos prácticos necesarios para tener éxito es clave».
En este sentido, la Conferencia que se celebra estos días en El Cairo adquiere una enorme importancia, ya que se espera obtener de ella el respaldo tanto político como financiero necesario para apoyar esta transición hacia las fuentes limpias.
Inversores y políticos
La conferencia reúne a inversores y responsables de políticas nacionales de Egipto y de toda la región de Medio Oriente y África del Norte para promover la transformación de la energía en todo Egipto a medida que persiga objetivos a corto y medio plazo.
Al fortalecer el entorno propicio para la inversión y el desarrollo de energía renovable, Egipto puede aumentar la velocidad de su transformación energética, brindando beneficios económicos más amplios al país, como la creación de empleos, mejoras de salud y seguridad energética», ha aseverado el director general de IRENA, Adnan Z. Amin.