Los gobiernos de Reino Unido y Canadá han unido sus esfuerzos para lanzar el desafío Power Forward, una iniciativa de 30 meses de duración que reta a los innovadores de ambos países a crear nuevas soluciones tecnológicas destinadas a transformar las redes eléctricas tradicionales en sistemas de energía inteligentes.
El Power Forward Challenge responde a la creciente necesidad de integrar nuevas tecnologías en los sistemas de energía inteligentes, como las fuentes renovables, la movilidad eléctrica, los dispositivos inteligentes o el almacenamiento de energía, todo ello respetando el medio ambiente y aportando seguridad de suministro ante interrupciones generadas por eventos naturales.
Ambos gobiernos, a través del Natural Resources Canada y el Departamento de Negocios, Energía y Estrategia Industrial (BEIS) del Reino Unido aportarán a este desafío un total de 10 millones de dólares canadienses (unos 6,6 millones de euros) que se sumarán a los 13,38 millones de euros con los que cuenta la iniciativa.
Equipos mixtos
El Power Forward Challenge otorgará a seis equipos hasta tres millones de dólares canadienses para demostrar soluciones que puedan integrar mejor los diversos recursos de energía en la red existente de la manera más flexible, confiable y segura. El equipo con la tecnología de mayor rendimiento recibirá un millón adicional. Cada equipo debe incluir miembros canadienses y británicos.
Esta iniciativa ayudará a vincular a las empresas de tecnología limpia en Canadá y el Reino Unido, a crear nuevas oportunidades económicas para los innovadores en ambos países y a apoyar la competitividad de las tecnologías de redes inteligentes.
El Power Forward Challenge es el tercero de los cinco desafíos de tecnología limpia del programa Cleantech Impact de Natural Resources Canada, que cuenta con una inversión de 75 millones de dólares canadienses (50 millones euros, aproximadamente) durante cuatro años.