Iberdrola ha elegido a MHI Vestas Offshore Wind como proveedor oficial de las turbinas para el parque eólico marino alemán Baltic Eagle, de 476 MW de capacidad. El contrato incluye hasta un máximo de 52 aerogeneradores del modelo V174-9.5 MW. La entrega e instalación de estos equipos se prevé para los años 2022 y 2023. Al ser turbinas más grandes y eficientes, el proyecto Baltic Eagle propicia una significativa reducción del coste de la energía eólica marina.
Con esta decisión, Iberdrola reafirma su compromiso con el desarrollo de este nuevo proyecto renovable, ubicado en el Báltico alemán, a 75 km de la costa de la isla de Rügen, y que ocupa una superficie de 40 km2. Tras el lanzamiento de la campaña geotécnica, el pasado verano, todas las gestiones necesarias para el diseño y contratación de los componentes principales avanzan conforme al programa previsto.
Baltic Eagle, adjudicado el año pasado en la segunda licitación marina convocada por la Agencia Federal de Redes (Bundesnetzagentur), es la segunda iniciativa marina más importante que Iberdrola ha emprendido en Alemania. En este país, que se ha convertido en uno de sus mercados estratégicos en este ámbito, conectó con éxito a la red el parque eólico Wikinger, de 350 MW, a finales de 2017.
Alemania, mercado estratégico para Iberdrola
Junto con Wikinger y Wikinger Süd, Baltic Eagle dará lugar al mayor complejo eólico marino del Báltico, con una potencia total instalada de 836 MW y una inversión acumulada de 2.500 millones de euros. El nuevo proyecto tendrá capacidad para producir la energía suficiente como para satisfacer el 45% de todo el consumo eléctrico del estado de Mecklemburgo-Pomerania Occidental y evitará la emisión de 1,65 millones de toneladas de CO2 al año, con lo que contribuirá al cumplimiento de los objetivos de reducción de emisiones de Alemania.
La explotación del parque, que estará conectado a la subestación de Lubmin a través de dos nuevos cables de alta tensión de cuya instalación se encargará 50Hertz, se realizará desde el puerto de Mukran, en la isla de Rügen.
La apuesta de Iberdrola por las tecnologías más avanzadas disponibles en cada momento, en este caso turbinas más grandes y eficientes para el proyecto Baltic Eagle, está propiciando una reducción significativa en el coste de la energía eólica marina.