GE Research va a emprender un proyecto de tres años para desarrollar y demostrar un disyuntor superrápido de circuito DC, esencial para habilitar las redes de corriente directa de media tensión (MVDC) de próxima generación. El fin último de este proyecto es ampliar las oportunidades para que las áreas congestionadas accedan a fuentes de energía limpias y remotas.
Este proyecto cuenta con fondos del U.S. Department of Energy’s Advanced Research Projects Agency – Energy (ARPA-E), la agencia de investigación avanzada dependiente del Departamento de Energía de los Estados Unidos, y forma parte de un interés más amplio de ARPA-E para actualizar las redes de distribución de corriente alterna (CA) existentes y ampliar el acceso a la red eléctrica.
Muchas de las grandes áreas urbanas se enfrentan hoy en día a una mayor demanda de electricidad debido a crecientes aplicaciones, como la carga de vehículos eléctricos. Sin embargo, estas ciudades tienen un acceso limitado a nuevas fuentes de energía, según ha explicado Timothy Sommerer, científico de GE Research y principal investigador del programa MVDC. «Al convertir las redes de distribución AC existentes en modernas redes MVDC, permitimos a estas ciudades crear una red mucho más amplia para asegurar nuevas fuentes de energía limpia y renovable», añade Sommerer.
El reto de las grandes tecnologías
El desafío de la tecnología de GE Research es desarrollar un disyuntor de corriente CC superrápido que permita la conversión de la corriente AC a MVDC en un tiempo extremadamente rápido. Para ello, el equipo aprovechará la innovadora tecnología de tubos de descarga de gas de GE Research para desarrollar el interruptor de circuito MVDC.
Las líneas de distribución de MVDC previstas para satisfacer las necesidades eléctricas de las grandes ciudades soportarán hasta 100.000 voltios y más de 100 MW de potencia. El desarrollo de tecnologías de red de CC podría aumentar enormemente la flexibilidad que tienen las empresas de servicios públicos para abordar futuras necesidades de energía, concluye Sommerer.