Un total de 55.875.979 euros serán destinados para suministrar energía eléctrica a partir de fuentes renovables a las instalaciones de las cuatro sociedades del Canal Isabel II en Madrid: Canal de Isabel II, Hidráulica Santillana, Hispanagua y Canal de Comunicaciones Unidas. El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha sido informado esta semana sobre la propuesta de adjudicación de los contratos de este suministro de energía eléctrica con certificados de garantías de origen a partir de fuentes de energía renovable. La duración del contrato será de un año, comenzando desde el 1 de enero de 2020, hasta el 31 de diciembre del mismo año. Esta propuesta se encuentra a la espera del visto bueno del Consejo de Administración del Canal.
Si el Canal de Isabel II acepta este contrato, según un comunicado de la Comunidad de Madrid, toda la energía utilizada durante este periodo deberá proceder de fuentes de energía limpias, las cuales tienen que certificarse como tal. Este compromiso se enmarca en el Plan Estratégico 2018-2030 de la empresa pública y, concretamente, en la línea que tiene como objetivo impulsar la calidad ambiental y la eficiencia energética.
El plan estrella de esta línea es el Plan de Generación Limpia, que no solo apuesta por el consumo exclusivo de energía renovable o de alta eficiencia, sino también por convertir a Canal en una empresa de su sector en Europa que produzca una cantidad de energía igual o superior a la que consume.
Antecedentes
Durante el año 2018, el Canal de Isabel II en la Comunidad de Madrid tuvo un consumo de casi 460.000 megavatios hora de energía eléctrica, en el que se incluyen todas las actividades de la empresa, desde el abastecimiento hasta el consumo de las oficinas.
Conscientes de la importancia que dicho consumo tiene, la Comunidad de Madrid, a través del Canal de Isabel II, ha venido desarrollando iniciativas para la generación de energía eléctrica a través de procesos sinérgicos con la gestión del agua, como microturbinas en redes de abastecimiento y en EDAR, cogeneración mediante el tratamiento de lodos, centrales hidroeléctricas o plantas de generación eléctrica a partir de biogás. De hecho, Canal de Isabel II es, en la actualidad, la empresa de la Comunidad de Madrid con mayor capacidad instalada para la producción de energía eléctrica.
Así, en 2018 Canal produjo en sus instalaciones el 68 % de la energía eléctrica que consumió, el equivalente al consumo anual de una población como Móstoles. Esta generación eléctrica ha permitido evitar la emisión de 77.100 toneladas de CO2 a la atmósfera: lo que emitirían anualmente 52.000 coches.