El Gobierno de Canarias ha aprobado este lunes el decreto que ordena la ejecución de una nueva interconexión eléctrica entre Lanzarote y Fuerteventura mediante un cable submarino a 132 kV con una longitud de algo más de 17 kilómetros.
Las obras de ejecución de la nueva línea eléctrica entre ambas islas forma parte del plan de ampliación de la red de transporte de energía eléctrica del Sistema Eléctrico Canario y se desarrollará entre la subestación de Playa Blanca, al sur de Lanzarote, y la subestación de La Oliva, en Fuerteventura.
Garantía de cabida de energía eólica en la red
El decreto ordena que debe revisarse o modificarse el planeamiento territorial afectado por las obras del cable submarino en un plazo máximo de seis meses. Se trata de una obra de «vital importancia» para Red Eléctrica de España, que promueve el proyecto, ya que proporcionará una segunda vía para la evacuación, transporte y alimentación de las demandas de electricidad en ambas islas.
Además, esta interconexión eléctrica «garantizará la cabida del máximo de generación de energía eólica», por lo que favorecerá la integración de renovables y la reducción de emisiones CO2 del sistema eléctrico de las islas, según un informe de Red Eléctrica sobre el proyecto.