La empresa Ayesa forma parte del proyecto Super PV, que tiene como objetivo mejorar el ciclo de vida de las plantas fotovoltaicas. Este proyecto dispone de un presupuesto de 11,6 millones de euros, de los cuales 9,9 millones están financiados por el programa Horizonte 2020 de la Unión Europea y en el que intervienen un total de 26 partners.
Hace un año se puso en marcha este proyecto que se divide en diferentes paquetes de trabajo como el de diseñar un modelo BIM específico para plantas fotovoltaicas. Se pretende poder visualizar el proyecto en 3D, al tiempo que se consigue un trabajo más colaborativo, multidisciplinar y eficiente.
La participación de Ayesa en este paquete de trabajo consiste en desarrollar una plataforma tecnológica de operación y mantenimiento (O&M) inteligente, que aplique las ventajas del IoT y el Data Mining a la explotación de plantas fotovoltaicas. De esta forma, se conseguirá mejorar la rentabilidad y la eficiencia de las propias instalaciones.
Por otro lado, se implementará un modelo de gemelo digital, que permita anticipar y evitar averías, así como pérdidas facilitando un mantenimiento predictivo de las instalaciones.
Segunda fase del proyecto Super PV
Para la segunda fase del proyecto, se prevé llevar a cabo una demostración de todas las soluciones desarrolladas en tres escenarios diferentes. En el caso de Ayesa, será la encargada del clima tropical y húmedo.
De este modo, se instalarán prototipos de tres tecnologías diferentes de paneles e inversores y se monitorizarán los rendimientos correlacionando los resultados con las medidas de temperatura, humedad e irradiancia solar.
Objetivos de Super PV
El objetivo final de Super PV es el desarrollo de sistemas fotovoltaicos de calidad superior, basados en una combinación híbrida de innovaciones tecnológicas y diferentes soluciones de operación, con el objetivo de acelerar el despliegue a gran escala en Europa y ayudar a las empresas de la UE a recuperar el liderazgo en el mercado mundial.
El consorcio está liderado por Uab Soli Tek R&D en colaboración con el grupo de investigación Protech de la Universidad de Lituania y cuenta con socios de España, Alemania, Francia, Suiza, Marruecos, Holanda, Noruega, Eslovenia, Bélgica y Túnez.