La startup suiza Insolight ha desarrollado una tecnología pionera de panel solar fotovoltaico con una eficiencia récord del 29%, validada por el Instituto de Energía Solar de la Universidad Politécnica de Madrid, muy por encima del rendimiento de los paneles comerciales estándar, que se halla en torno al 18-20%. El consorcio Hiperion, compuesto por 16 socios industriales, entre ellos la Universidad Politécnica de Madrid, pretende fabricar a gran escala esta tecnología.
El consorcio Hiperion (Hybrid Photovoltaics for Efficiency Record using Integrated Optical techNology) tiene como objetivo permitir la fabricación a gran escala de la tecnología de Insolight, mostrando cómo los fabricantes de paneles solares convencionales de silicio puedan adaptar sus líneas de fabricación.
El consorcio Hiperion ha sido escogido por la Unión Europea para participar en el programa H2020 de la UE que tiene por objetivo “incrementar la competitividad de la industria europea fotovoltaica”. La CE ha concedido al consorcio 10,6 millones de euros para desarrollar el proyecto en un plazo de 48 meses bajo la coordinación del organismo suizo de investigación CSEM.
Reducción de costes de generación solar
El innovador diseño de Insolight tiene el potencial de reducir los costes de generación solar a través de un incremento significativo de la eficiencia de los paneles, ya que presenta una eficiencia pico un 50% mayor que la de los paneles convencionales. La combinación de esta tecnología pionera y las soluciones de fabricación adaptables a la industria actual que se desarrollarán en el proyecto Hiperion se dotará a los fabricantes fovoltaicos europeos de una ventaja competitiva fundamental, que les permitirá mejorar su cuota en el creciente mercado fotovoltaico.
La tecnología desarrollada utiliza un sistema de microseguimiento integrado para concentrar la luz solar sobre microcélulas de alta eficiencia, por lo que no precisa de seguidores solares externos y puede ser utilizada tanto en plantas de suelo como en instalaciones de tejado residencial o comercial, lo que favorecerá su penetración en el mercado fotovoltaico. Una célula solar convencional de silicio hace las veces de sustrato para las microcélulas, por lo que toda la luz no concentrada (difusa) se captura también. Se trata por tanto de un sistema híbrido capaz de trabajar en condiciones de cielo nublado, a diferencia de los sistemas de concentración clásicos, según indica la UPM.