Capturar eficientemente la energía solar y almacenarla hasta que sea necesaria. Así funciona el nuevo dispositivo híbrido desarrollado por investigadores de la Universidad de Houston que, a diferencia de los paneles solares y las células solares que dependen de la tecnología fotovoltaica para la generación directa de electricidad, captura el calor del sol y lo almacena como energía térmica.
Esta nueva solución aborda algunos de los problemas que ralentizan la adopción a gran escala de la energía solar, sugiriendo una vía para usar la energía solar durante todo el día, a pesar de las horas limitadas de luz solar, los días nublados y otras limitaciones.
Se trata de una investigación publicada en la revista Joule, un trabajo que combina el almacenamiento de energía molecular y el almacenamiento de calor latente para producir un dispositivo integrado de recolección y almacenamiento para una posible operación 24/7.
Investigación de la Universidad de Houston
Los investigadores aseguran que se consigue una eficiencia del 73% en operaciones a pequeña escala y de hasta el 90% en operaciones a gran escala. Explican que hasta el 80% de la energía almacenada se recuperó por la noche, mientras que la recuperación durante el día fue aún mayor.
Hadi Ghasemi, profesor asociado de Ingeniería Mecánica Bill D. Cook de la Universidad de Houston, explica que esta alta eficiencia se debe, en parte, a la capacidad del dispositivo para capturar todo el espectro de la luz solar, con la posibilidad de su uso inmediato y de la conversión del exceso en almacenamiento de energía molecular.
El dispositivo se sintetizó utilizando un material de almacenamiento molecular, un compuesto orgánico que, según los investigadores, demuestra una alta energía específica y una liberación de calor excepcional, mientras se mantiene estable durante largos períodos de almacenamiento.
Por su parte, T. Randall Lee, profesor de química, explica que el dispositivo ofrece una eficiencia mejorada de varias maneras: la energía solar se almacena en forma molecular en lugar de calor, que se disipa con el tiempo, y el sistema integrado también reduce las pérdidas térmicas porque no hay necesidad de transportar la energía almacenada a través de tuberías.
El nuevo dispositivo permite que la energía almacenada produzca energía térmica a una temperatura más alta durante la noche que durante el día, lo que aumenta la cantidad de energía disponible incluso cuando el sol no brilla.