La Universidad de Arkansas dirige una investigación para proteger la tecnología solar de ataques cibernéticos

Tecnología solar

El Centro Nacional de Transmisión de Energía Eléctrica Confiable de la Universidad de Arkansas dirigirá un grupo de investigación multi-institucional que desarrollará sistemas para proteger la tecnología solar del ataque cibernético. La investigación se centrará en el desarrollo de sistemas de ciberseguridad para dispositivos y tecnología de energía fotovoltaica, especialmente los inversores fotovoltaicos solares.

El profesor Alan Mantooth dirigirá la investigación en la que participan varias universidades, centros y empresas.

Se abordarán temas como la seguridad de la cadena de suministro, los métodos de detección de intrusos en tiempo real, la identificación y mitigación de puntos vulnerables, la seguridad del sistema de control y los protocolos de seguridad.

Tras recibir una financiación de 3,6 millones de dólares de la Oficina de Tecnologías de Energía Solar del Departamento de Energía de EE.UU., Alan Mantooth, profesor de ingeniería eléctrica e investigador principal del proyecto, además de director del centro, dirigirá un equipo de investigadores de la Universidad de Georgia, la Universidad de Illinois en Chicago, Texas A&M University-Kingsville, el Laboratorio Nacional de Energía Renovable, el Laboratorio Nacional Argonne y General Electric. Además, dos compañías de Arkansas, Ozarks Electric Cooperative y Today’s Power, contribuirán al proyecto.

Seguridad para la integración de la energía solar en la red

El proyecto ‘Ciberseguridad multinivel para sistemas fotovoltaicos’ ayudará a mejorar la capacidad de los operadores de la red para integrar cantidades crecientes de generación solar en la red de una manera rentable, segura, resistente y confiable.

La iniciativa forma parte del programa de financiación del año fiscal 2019 de la Oficina de Tecnologías de Energía Solar, un esfuerzo por invertir en nuevos proyectos que reducirán los costos de electricidad solar, mientras trabajan para impulsar la fabricación solar, reducir la burocracia y hacer que los sistemas solares sean más resistentes al ataque cibernético.

 
 
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