La ciudad de Lund, ubicada en el sur de Suecia, acogió la semana pasada la inauguración de una carretera eléctrica de nueva generación. La solución que se está probando permite la carga de la mayoría de vehículos -autobuses, camiones pesados y turismos-, tanto estacionados como en movimiento, en entornos urbanos y autopistas. Esta tecnología ha sido desarrollada por la compañía sueca Elonroad AB, en colaboración con la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Lund.
El primer vehículo utilizado para las pruebas es un autobús eléctrico de Solaris, que operará una semana al mes en la carretera eléctrica. Durante el verano, se abrirá también un centro de visitantes en Lund, con el fin de compartir información sobre el proyecto.
En cuanto a su funcionamiento, la energía se transfiere desde los rieles de carga en la carretera hasta el vehículo a través de una recogida retráctil debajo del vehículo. El pick-up retráctil se conecta con los rieles de carga y el sistema conductivo permite una transmisión eficiente de hasta 300 kW de potencia al vehículo. El riel se alimenta en segmentos cortos de un metro de largo debajo del vehículo, lo que hace que el sistema sea seguro de implementar en cualquier carretera.
Consorcio Evolution Road
El proyecto está liderado por el consorcio sueco público-privado Evolution Road, además de estar apoyado y financiado por la Administración de Transporte de Suecia (Trafikverket), con el objetivo de probar y obtener más información sobre las carreteras inteligentes que cargan vehículos eléctricos estacionados o en circulación.
Con esta iniciativa se pretende dar respuesta a las dificultades que se presentan para cargar los vehículos eléctricos, debido a la falta de infraestructura de recarga. De hecho, las pruebas que se están llevando a cabo en Suecia son un primer paso para crear sistemas de carreteras eléctricas, que permitan avanzar hacia una movilidad sostenible que reduzca la dependencia de los combustibles fósiles.
El proyecto Evolution Road comenzó en 2019 y continuará hasta 2022, con la colaboración de nueve socios: Elonroad AB, Innovation Skåne AB, Kraftringen Energi AB, el Ayuntamiento de Lund, la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Lund, Ramboll, Skånetrafiken, Solaris Sverige AB y el Instituto Nacional de Investigación de Carreteras y Transporte de Suecia (VTI).
Por su parte, la Administración de Transporte de Suecia ha invertido 84 millones de coronas suecas -de un presupuesto global de 96 millones- en una iniciativa que permitirá obtener conocimientos sobre la tecnología, el funcionamiento, el mantenimiento y el impacto ambiental.