Red Eléctrica de España (REE) ha destacado la solidez de la red de transporte y la resiliencia y la flexibilidad de la operación del sistema durante el temporal de la borrasca Filomena. A pesar de la intensidad de las nevadas y las temperaturas gélidas, REE afirma que no se han registrado daños en las instalaciones de la red de transporte de Red Eléctrica, ni se han producido cortes de suministro por avería de la red, y que la digitalización y telegestión han permitido solventar rápidamente las incidencias ocurridas.
Las infraestructuras de alta tensión, estratégicas y críticas para el país, han aguantado bien el temporal y han seguido prestando el servicio de suministro eléctrico. Las incidencias que se han producido, todas ellas menores, se han concentrado fundamentalmente en las comunidades de Madrid, Castilla-La Mancha y Aragón, y han sido detectadas y aisladas convenientemente por los sistemas de protección, sin que el suministro a hogares, servicios públicos y empresas se haya visto afectado por cortes en la red de transporte.
La digitalización y la telegestión permiten la rapidez de resolución
Gracias a la rápida respuesta de los medios humanos disponibles durante todo el pasado fin de semana, a la digitalización de los sistemas y a la posibilidad de telegestión, la actuación de los retenes de servicios centrales permitió resolver la mayor parte de las incidencias rápidamente en remoto, minimizando de esta manera el desplazamiento de personal a las instalaciones. Desde REE aseguran que, si bien cuentan con más de 140 técnicos cada día listos para atender incidencias 24 x 7, únicamente fue necesaria la intervención presencial en un caso.
En total se han registrado unas 50 incidencias en la red de transporte, viéndose puntualmente afectados 12 circuitos, 5 transformadores y 1 reactancia a lo largo del fin de semana. Todas ellas se han gestionado de forma que en todo momento se garantizara la continuidad del suministro eléctrico desde la red de transporte.
Crecimiento notable de la demanda por la ola de frío
Desde el punto de vista de la operación del sistema, no se ha registrado ninguna alteración a lo largo de estos días. La demanda, que ha crecido notablemente como consecuencia de la ola de frío, entraba dentro de las previsiones llevadas a cabo por Red Eléctrica, que para este invierno había estimado superar los 42.000 MW, tal como se produjo el pasado viernes 8 de enero.
A nivel peninsular, y según datos provisionales, la demanda eléctrica el viernes fue de 834,9 GWh, el sábado de 736,1 GWh y el domingo de 703,3 GWh. Si se comparan estos datos con los del fin de semana del 18 al 20 de diciembre (antes del comienzo de las fiestas), se observa un incremento del 13%, y respecto al fin de semana del año anterior el crecimiento es del 7%.
Destaca especialmente el papel que durante estos días con mayor demanda eléctrica han jugado las interconexiones internacionales. Mientras que unos días antes, coincidiendo con los máximos de generación eólica que se registraron en la península, las interconexiones permitieron exportar el excedente a nuestros países vecinos, el viernes 8 de enero volvieron a ser una herramienta clave que en esta ocasión hicieron posible que España importara más de 5 GW (3,4 GW procedentes de Francia y 1,7 de Portugal).