La Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena) ha publicado el informe ‘Infraestructura de calidad para minirredes inteligentes’, donde analiza el papel que tiene una infraestructura de calidad (QI) en el desarrollo de las minirredes renovables inteligentes.
Las minirredes son sistemas complejos que dependen de diferentes proveedores y utilizan diversas aplicaciones, que proporcionan varias ventajas. Por ejemplo, las minirredes conectadas a la red pueden aumentar la resistencia y confiabilidad del sistema de energía, al tiempo que facilitan la integración de la energía solar y eólica. Por su parte, las minirredes renovables alejadas de la red principal pueden proporcionar un acceso confiable a la electricidad para áreas e islas remotas.
Por otro lado, la creación de un mercado viable para las minirredes de base renovable, con perspectivas de crecimiento y rentabilidad a largo plazo para los inversores, depende del establecimiento de una infraestructura de calidad confiable para las tecnologías y los sistemas involucrados.
Para conseguir una QI confiable, el informe destaca que los estándares completos, las pruebas, la certificación y la acreditación, junto con el monitoreo y la metrología continuos, reducen los riesgos en el desarrollo de minirredes. Esto propicia la obtención de una QI efectiva, beneficiando a la financiación de proyectos, al tiempo que se reduce la incertidumbre legal, regulatoria y los costos de electricidad, mientras se fortalecen los mercados de minirredes.
El informe destaca que la capacidad instalada global supera los 4 GW para minirredes renovables fuera de la red, que utilizan principalmente bioenergía para fines industriales. Las minirredes hidroeléctricas están creciendo para comunidades e industrias, mientras que las instalaciones de minirredes solares fotovoltaicas (FV) apoyan usos comerciales, comunitarios y agrícolas.
Gestión de las minirredes
En cuanto a los usos de las minirredes renovables, se centran en la generación de energía, el almacenamiento, la conversión y el consumo de energía, y las aplicaciones de control, gestión y medición (CMM). Las plataformas IoT formarán la columna vertebral de la futura funcionalidad de CMM, con innovaciones en la tecnología de almacenamiento que mejorarán las aplicaciones de minirredes.
Las inversiones pueden fallar o existir una pérdida de producción de electricidad, si no se dispone de un sistema comunitario interconectado (IC) adecuado, el cual va de la mano en el desarrollo de una infraestructura de calidad. Por otro lado, los métodos de prueba más flexibles y rentables basados en modelos ampliamente estandarizados pueden reducir las percepciones de riesgo asociadas con las minirredes.
Por último, el informe señala que se requiere de un enfoque gradual para integrar el IC en los marcos de políticas, asegurando que las políticas de energía renovable del mundo real reflejen la evolución constante de estas redes.