El Consejo Europeo adoptó la semana pasada unas Conclusiones sobre diplomacia climática y energética, en cumplimiento con la dimensión exterior del Pacto Verde Europeo. En ellas, subraya que la diplomacia energética de la UE tendrá como objetivo principal acelerar la transición energética mundial y fomentará, entre otras cosas, la eficiencia energética y la tecnología en el ámbito de las energías renovables.
El Consejo Europeo observa que, aunque la transición energética es fundamental para avanzar hacia la neutralidad climática, tendrá efectos considerables en las sociedades, las economías y la geopolítica a escala mundial. Destacan que la diplomacia energética de la UE seguirá desempeñando su papel en el mantenimiento y el refuerzo de la seguridad y la resiliencia energéticas de la UE y de sus socios.
Al mismo tiempo, se subraya que la diplomacia energética de la UE desalentará las inversiones adicionales en proyectos de infraestructura energética basados en combustibles fósiles en terceros países, y apoyará los esfuerzos internacionales encaminados a reducir el impacto medioambiental y de gases de efecto invernadero de las infraestructuras existentes para combustibles fósiles.
Asimismo, el Consejo Europeo pide la eliminación gradual en todo el mundo del carbón en la producción de energía y va a poner en marcha iniciativas internacionales para reducir las emisiones de metano.
Acción por el clima
Por otro lado, en las conclusiones sobre diplomacia climática, el Consejo Europeo observa que la acción mundial por el clima sigue siendo insuficiente para alcanzar los objetivos a largo plazo del Acuerdo de París y de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Reconoce que, aunque Europa muestra su liderazgo dando ejemplo al redoblar sus compromisos internos, se necesita urgentemente una acción colectiva y contundente a escala mundial. Y considera que la ejecución coherente de los objetivos de la política exterior es crucial para el éxito del Pacto Verde Europeo.
El Consejo pide a todas las partes que aumenten la ambición de sus contribuciones determinadas a nivel nacional y que presenten sus estrategias a largo plazo para un desarrollo con bajas emisiones con suficiente antelación para la 26ª Conferencia de las Partes, que se celebrará en Glasgow en noviembre de 2021.