El libro blanco ‘Edificios en el nuevo paradigma energético. Evolución y perspectivas’, publicado recientemente por Schneider Electric, especializada en la transformación digital de la gestión de la energía y la automatización, y Prysmian Group, fabricante de cables de energía, telecomunicación y accesorios, analiza y ofrece medidas basadas en los costes de las energías renovables y en la oportunidad que ofrece la digitalización en la gestión de la energía.
El objetivo de este libro blanco es informar y aportar ideas que ayuden al sector de la edificación a afrontar los nuevos retos que se presentan. Los principales temas tratados en el libro son la edificación 4.0, edificios de consumo casi nulo, los edificios inteligentes, industrialización de la construcción y normativas y ayudas de la Unión Europea.
Edificación 4.0 e industrialización de la construcción
Para edificar de forma más rápida y eficiente, los constructores recurrirán a la innovación y a la industrialización de todos los procesos constructivos. La industrialización permite optimizar todos los procesos, ahorrar tiempo y costes y mejorar la seguridad de los trabajadores. Además, tal y como indican los autores de la publicación, la construcción industrializada hace que todo el proceso sea más sostenible, ya que se optimiza el uso de materiales y energía, y permite utilizar materiales reutilizables y reciclables que reducen el impacto ambiental.
Para la edificación 4.0 también resulta fundamental el Building Information Modelling (BIM), herramienta que integra métodos y aplicaciones de la Industria 4.0 en todo el ciclo de vida del edificio, así como la entrada del Big Data a través de la sensórica, elevando la categoría del edificio a inteligente.
Los edificios de consumo casi nulo
“Los edificios de consumo de energía casi nulo (ECCN) son edificaciones que cumplen con un nivel mayor de eficiencia energética y confort, y que poseen un consumo de energía muy bajo que está cubierto por fuentes renovables producidas en el propio edificio o en su entorno más próximo”, apunta Joan Panella, de Prysmian Group.
En España, el recientemente renovado Código Técnico de la Edificación (CTE) es el puente de entrada a la normativa europea de este tipo de edificios. El CTE indica que una vivienda de clase A es un 90% más eficiente energéticamente que una con clasificación G, equivalente a un consumo de 56 kWh/m2 en las de clase A frente a los 516 kWh/m2 en las de clase G.
La década del edificio inteligente
Se prevé que, en 2022, los dispositivos conectados en los edificios inteligentes alcancen los 483 millones de unidades. Estos dispositivos no solo maximizan el confort de los ocupantes, sino que ayudan a optimizar el consumo y, por ende, los costes, permitiendo alcanzar ahorros de costes energéticos que pueden llegar a superar el 30%.
“Dotar de inteligencia a un edificio significa conectar toda la sensórica para que, en cada momento, se consuma únicamente lo necesario y, así, acabar reduciendo a la mínima expresión ese 40% de emisiones de CO2. La clave en este sentido es realizar una gestión integrada del edificio desde la fase de diseño del activo hasta la explotación y mantenimiento gracias a la digitalización”, explica Jesús Requena, de Schneider Electric.
Normativa y ayudas de la UE. PREE y MOVES III
Conscientes del importante papel de la construcción para alcanzar los objetivos de sostenibilidad, Europa está poniendo en marcha múltiples medidas que le interpelan directamente. En España, destacan los planes PREE y MOVES III, centrados en mejorar la eficiencia y la sostenibilidad tanto del sector de los edificios como del transporte. “Es importante señalar que las medidas que se proponen en el libro blanco son susceptibles de recibir este tipo de ayudas, por su impacto en la eficiencia energética y la sostenibilidad de los edificios. Es fundamental que el sector aproveche la gran oportunidad que le ofrecen”, comenta Jesús Requena.
Todas estas nuevas tendencias están provocando un gran cambio en los roles profesionales del sector de la edificación. Unas tendencias cuya implantación requiere de nuevas especialidades y competencias y cuya inclusión como nuevas ocupaciones en los planes de formación profesional impulsará los nuevos empleos. “Especialistas en BIM, robótica integradores, así como especialistas en IoT y ciberseguridad, serán algunos de los perfiles más demandados en los próximos años”, señala Joan Panella.