El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) ha lanzado la web denominada ‘Euros por cada 100 kilómetros’ para comparar el coste de los distintos combustibles para los vehículos, incluida la electricidad.
El sitio web ‘Euros por cada 100 kilómetros’ recoge los costes medios nacionales de los carburantes tradicionales y alternativos, incluida la recarga eléctrica, en EUR/100 km para permitir a los consumidores comparar los costes en base a una metodología común europea, aportando transparencia al precio de los combustibles.
La web facilitará el cumplimiento de la normativa comunitaria y nacional, que establece que todas las estaciones de servicio con ventas que superen los 5 millones de litros y aquellas que vendan combustibles alternativos deberán tener, a partir del 1 de abril, un panel informativo con los precios nacionales en euros por cada 100 kilómetros de los combustibles mayoritarios, que será actualizado trimestralmente.
Los precios medios nacionales se calculan a partir de consumos homologados de una muestra de vehículos representativa y las estaciones de servicio pueden elegir libremente la forma, ubicación y formación de esta información, siempre que sea visible para los usuarios.
La opción más económica es la recarga eléctrica doméstica
El portal cuenta con un panel informativo con los costes medios nacionales actualizados en EUR/100 km, que se calculan a partir de fuentes de información oficiales, como el Geoportal Gasolineras del Miteco. Según los datos ofrecidos correspondientes al día 2 de marzo, por cada 100 kilómetros el coste del combustible para vehículos más barato es la recarga eléctrica doméstica con 2,21€; mientras que la recarga rápida se sitúa en 6,16€.
Asimismo, dispone de un buscador que permite conocer el coste por 100 kilómetros por modelo de vehículo. Para esta funcionalidad, se utilizan los consumos homologados disponibles en la base de datos de vehículos nuevos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).
La página web también ofrece a los consumidores información sobre la normativa aplicable y la metodología de cálculo. Entre otras cosas, recoge quién debe exhibir la comparativa de precios, qué datos se deben mostrar, de qué manera y cuándo.