El proyecto de investigación francoalemán Molibe, que se está llevando a cabo en el Helmholtz Institute de Ulm (HIU), ha alcanzado un paso intermedio en sus investigaciones sobre una batería recargable completamente sólida y libre de metales. Los científicos han desarrollado con éxito células completas orgánicas que funcionan de manera estable durante varios cientos de ciclos.
Para que la transición energética sea un éxito, es necesario ampliar las energías renovables y las redes eléctricas, pero también sistemas de almacenamiento de energía sostenibles y seguros. Las baterías de iones de litio se consideran la tecnología más prometedora para el almacenamiento de energía reversible, pero en la actualidad siguen siendo demasiado caras e inseguras para un uso generalizado. Los elevados costes se derivan del uso de metales como el cobalto, el níquel o el litio-cobre. Las preocupaciones de seguridad se aplican a la fácil inflamabilidad y la baja estabilidad de los electrolitos líquidos.
Celdas estables tras más de 5.000 ciclos
Por lo tanto, el proyecto Molibe, financiado por el Ministerio Federal de Educación e Investigación (BMBF) de Alemania, está trabajando en baterías recargables completamente sólidas, libres de metales, hechas de materiales activos orgánicos y sistemas de electrolitos poliméricos. Los investigadores ahora han logrado su primer gran éxito: desarrollar células completamente orgánicas que funcionan de manera estable durante varios cientos de ciclos, pero que aún contienen iones de Li. Una de las dos medias celdas desarrolladas es estable incluso durante más de 5.000 ciclos.
El proceso de síntesis eficiente y sostenible de los materiales activos es un componente importante para una posible comercialización de la tecnología. Por lo tanto, el socio francés del proyecto, CEA, ya está planificando una solicitud de patente para el proceso.
Los próximos pasos del proyecto ya se están planificando: los científicos quieren introducir un nuevo electrolito polimérico desarrollado por el proyecto. Desean aumentar el voltaje de la celda a más de 2.0 voltios para aumentar la densidad de energía y reemplazar los iones de Li con iones metálicos menos críticos como el sodio o, incluso, con iones no metálicos.