Los primeros siete proyectos relacionados con el cierre de la central térmica de Compostilla ya cuentan con la aprobación del Comité de Evaluación compuesto por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la Junta de Castilla y León, las alcaldías de Ponferrada y de Cubillos del Sil, la Universidad de León y Endesa. Los proyectos están relacionados con el hidrógeno verde y el almacenamiento de energía eléctrica, además del reciclaje de baterías de vehículos eléctricos y de palas eólicas, entre otros aspectos.
Una de las iniciativas que ha recibido el visto bueno para instalarse en el entorno de la antigua central de Compostilla es una fábrica de reciclaje de baterías de vehículos eléctricos, en la que Endesa se asociará con Northvolt y Urbaser para ejecutar una inversión de 14 millones de euros.
Otros proyectos se basan en una planta de reciclaje de palas eólicas, en la que también participa Endesa y que requerirá una inversión de 8 millones de euros; una fábrica de hidromagnesitas, promovida por el Grupo Viloria, que aportará una inversión de 6 millones a la zona; un almacén logístico eólico de Enel Green Power España con una inversión inicial de 100.000 euros; una planta de hidrógeno alimentada por energía solar fotovoltaica, impulsada por Endesa, con capacidad para producir 200 toneladas al año de hidrógeno verde y una inversión aproximada de 6 millones de euros.
El resto de proyectos consiste en una planta de baterías de almacenamiento de energía eléctrica, con 380 MW de capacidad y una inversión de 228 millones de euros; y una fábrica de materiales aislantes, iniciativa del Grupo Viloria, con una inversión estimada de 8,2 millones.
Proyecto adicional
De manera adicional, también se ha dado luz verde a la utilización de equipos que se utilizaban en la central para un proyecto complementario. Se ha acordado la cesión de cuatro estufas de carbón de la central para una planta de deshidratado y envasado de frutas y hortalizas que también promueve el Grupo Viloria en las instalaciones que actualmente tiene en Cubillos del Sil.
El conjunto de todas estas iniciativas que acompañan el cierre de la central podrían movilizar una inversión que supera los 260 millones de euros y generar alrededor de 160 nuevos puestos de trabajo de forma directa.
Concurso internacional para la selección de proyectos
La selección de proyectos se ha realizado a través de un concurso internacional para promover la implantación de empresas en el Bierzo que mitiguen el fin de la actividad de generación térmica. Este proceso forma parte del plan Futur-e, presentado por Endesa para paliar los efectos del cierre de la central de Compostilla. Un plan que incluye el desarrollo de 625 MW renovables en la zona, además de la organización de cursos de capacitación profesional para la población local afectada por el cierre y la priorización de mano de obra local en las tareas de desmantelamiento circular de la central térmica, entre otras actuaciones.
Los miembros del Comité de Evaluación han destacado las características de sostenibilidad e innovación de los proyectos aprobados, que atraerán actividad económica y generarán empleo en el Bierzo.
Algunas de las iniciativas podrían desarrollarse en el emplazamiento de la central de Compostilla, que realizará un desmantelamiento circular, en el que algunas instalaciones para los nuevos proyectos empresariales y los materiales también serán reutilizados. En los próximos meses terminará de concretarse la configuración definitiva del conjunto de los proyectos y su emplazamiento en la zona.