El Gobierno de Islas Baleares acaba de presentar un plan inicial de colaboración conjunta con el Consejo Insular de Mallorca para la instalación de placas solares en espacios degradados de las carreteras de la isla y así cumplir con el objetivo de la Ley de cambio climático y transición energética de descarbonizar el territorio.
El proyecto fue presentado el pasado miércoles 24 noviembre por el vicepresidente del Gobierno y consejero de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, junto con el consejero de Movilidad e Infraestructuras del Consejo de Mallorca, Iván Sevillano; el director general de Energía, Pep Malagrava, y el director gerente del Instituto Balear de la Energía, Ferran Rosa.
Un potencial de hasta 150 MW de potencia renovable
Sólo para la isla de Mallorca, el estudio de viabilidad realizado por el Consejo de Mallorca prevé un potencial de hasta 150 MW de potencia renovable, el equivalente al consumo de entre 30.000 y 45.000 familias. Su instalación permitiría incrementar un 5% la penetración de renovables en Baleares.
La inversión total de este plan sería de entre 100 y 150 millones de euros y al menos una parte sería susceptible de ser financiada por los fondos NextGeneration sobre la base de las ayudas publicadas, así como en próximas líneas que provengan del Fondo de Islas Sostenibles.
Este plan inicial contempla la instalación de placas solares en espacios degradados y sin uso cercanos a las carreteras, como terrenos adyacentes a las salidas de autopistas o taludes, generalmente sin valor ecológico, así como barreras acústicas o medianeras.
También se contempla la instalación de pérgolas fotovoltaicas sobre aparcamientos; en carreteras, que incluyan paneles solares sobre la cubierta, o que los paneles formen la misma estructura. Además, se establece la instalación de placas solares en instalaciones artísticas o de diseño para que puedan producir energía fotovoltaica. Así, podrán instalarse en lugares visibles como rotondas, estaciones de autobús, ubicaciones próximas a carreteras, etc.
Instalaciones gestionadas por el IBE
Estas instalaciones podrían ser gestionadas por el Instituto Balear de la Energía, IBE, tanto para autoconsumos compartidos con consumos en un radio de 500 metros, como para la generación de energía para ser comercializada.
El plan que el Gobierno Balear y el Consejo de Mallorca tienen previsto presentar en breve se implementará a corto plazo y deberá servir para el autoconsumo de la red de carreteras y para la venta a la red del resto de energía. Se trata, por tanto, de una actuación que contribuirá a lograr los objetivos de emisiones y renovables de la Ley de cambio climático y transición energética.
Un proyecto para descarbonizar las islas
La dirección general de Energía y Cambio Climático se pondrá también a disposición del resto de islas para que se puedan elaborar planes similares y que los fondos europeos sean el motor para poder impulsar esta energía en estos entornos. La prioridad es que estos espacios públicos puedan ser empleados por el IBE para generar y comercializar energía, en autoconsumos compartidos en los casos que la distancia lo permita o directamente como comercializadora pública.
El objetivo del Gobierno, a través de la coordinación de la Dirección General de Energía y Cambio Climático y con el apoyo del Instituto Balear de la Energía, es trasladar este tipo de proyectos establecidos en el Plan al resto de islas, con el objetivo de continuar con la descarbonización y conseguir un abaratamiento de la factura de la luz.