Europa invierte actualmente 40.000 millones de euros al año en sus redes eléctricas. Sin embargo, las inversiones anuales deben duplicarse en los próximos 30 años hasta los 80.000 millones de euros al año, según el nuevo informe de Hitachi Energy y WindEurope. Sin estas inversiones, según el documento, no se alcanzarán los objetivos climáticos.
El informe muestra, bajo un nuevo enfoque, cómo las redes eléctricas de Europa deben desarrollarse de manera proactiva para permitir la neutralidad climática de Europa en 2050. La red eléctrica será la columna vertebral de un sistema energético dominado por las energías renovables. Un sistema de energía neta cero que funciona en gran medida con electricidad renovable puede seguir siendo confiable y resistente, pero la red eléctrica de Europa necesita expandirse, reforzarse y optimizarse.
La electrificación, la forma más rentable de descarbonizar la economía
Según el informe, en contra de lo que se podría pensar, un aumento de 80.000 millones de euros anuales en las inversiones en la red para alcanzar un sistema de energía más eficiente y mayormente electrificado en 2050 no costará más como parte del PIB de lo que cuesta hoy.
La electrificación es la forma más rentable de descarbonizar la economía europea y supondrá el 75% de la demanda energética de Europa para 2050. La Comisión Europea quiere que la energía eólica sea la mitad de la electricidad de la UE para entonces. Sin embargo, el documento de WindEurope indica que esto solo puede suceder si las redes eléctricas se optimizan y amplían de manera oportuna.
El tercer paquete energético de la UE es un paso en la dirección correcta con su proceso de planificación para redes de transporte, el Plan de desarrollo de redes de diez años y códigos de red en toda Europa. Sin embargo, WindEurope subraya que con la velocidad requerida por los objetivos climáticos, se necesitan mejoras adicionales.
Prácticas de aplicación inmediata
El informe propone una serie de prácticas que se pueden mejorar inmediatamente y cita, por ejemplo, que la planificación de redes y nuevas energías renovables debe ocurrir simultáneamente. Los permisos deben ser más rápidos para reducir los tiempos de espera durante la fase de planificación, donde hay que tener en cuenta las nuevas funcionalidades de infraestructura.
El estudio señala también que las partes interesadas en toda la cadena de valor del sistema de energía deben alinearse desde el inicio de un proyecto, lo que disminuirá el riesgo de inversiones bloqueadas.
Además, la red eléctrica europea debe tratarse como un sistema verdaderamente europeo con procesos de decisión y planificación a nivel de la UE. La planificación y el despliegue deben estar alineados desde las redes marinas hasta las redes de transporte terrestres y las redes de distribución.
El documento indica, asimismo, que una red preparada para el futuro no se limita solo a nuevos cables eléctricos. También tendrán que ofrecer nuevas funcionalidades que son exclusivas de un sistema de energía basado en energías renovables. Tecnologías como HVDC, superconductividad y configuraciones de múltiples terminales con múltiples proveedores ya existen. El informe sostiene que ahora llega el momento de desplegarlos. En este ámbito, la digitalización también será fundamental para lograr la velocidad y la escala requeridas.