El Consejo de Ministros ha aprobado el Real Decreto, dotado con 499 millones de euros, por el que se regula la concesión directa de subvenciones para la financiación de actuaciones contempladas en la ‘Estrategia de Energía Sostenible en las Islas Canarias’ y el ‘Plan de Inversiones para la Transición Energética de les Illes Balears’. Las comunidades autónomas serán las encargadas de llevar a cabo las actuaciones, que tendrán un impacto transformador en el ámbito energético de los dos archipiélagos.
Las actuaciones previstas para la descarbonización de las islas tienen un presupuesto de 700 millones en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) para la ejecución de los fondos Next Generation EU, de los que casi 500 millones -los regulados por este real decreto- los gestionarán los gobiernos insulares, mientras que los 200 millones restantes los gestionará el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).
Según las previsiones del Gobierno, la potencia renovable instalada en estos territorios se verá más que duplicada, de manera que superen un tercio de aportación renovable a su mix eléctrico, mientras que el autoconsumo se multiplicará por seis en Baleares y por diez en Canarias. Asimismo, se electrificarán rutas marítimas entre las islas.
Ambas estrategias han sido diseñadas conjuntamente por el Miteco y los gobiernos autonómicos tras abordar las especificidades de cada archipiélago y estarán sujetas a un calendario de cumplimiento de los hitos previstos, a la existencia de proyectos y a una ejecución adecuada de los mismos.
Energías renovables y nuevos puntos de recarga públicos
En el marco de este Real Decreto, se destina a las islas un total de 499 millones de euros, de los cuales Canarias recibirá unos 302 millones, y Baleares otros 197 millones.
En Canarias, estos fondos movilizarán una inversión total superior a los 479 millones, que promoverá una potencia renovable de 265 MW y 1.150 nuevos puntos de recarga públicos, lo que supone cuatriplicar la cifra actual y llegar al 16% del objetivo previsto para 2030.
Por su parte, en Baleares se prevé una inversión superior a los 521 millones y las islas aumentarán su potencia renovable con más de 242 MW adicionales -un 10% de su demanda eléctrica-. Además, se instalarán 2.000 nuevos puntos de recarga públicos, lo que significa triplicar los existentes y establecer una ratio de un punto por cada 300 vehículos, aproximadamente.
Los sistemas insulares presentan especificidades relevantes en el ámbito energético que dificultan su descarbonización, como una menor disponibilidad de territorio, retos en el binomio agua-energía o elevados costes de generación que repercuten en la factura eléctrica del consumidor. Cabe destacar que, en el caso de Canarias, el 96% de la energía consumida en las islas proviene de combustibles fósiles o derivados del petróleo, mientras que en Baleares esa dependencia es del 75%. Asimismo, la participación de energías renovables en el mix eléctrico se sitúa muy por debajo de la media estatal en ambos casos, con un 19,9% en Canarias y apenas un 5% en Baleares, frente al 48% del sistema eléctrico peninsular en el año 2021.