Un proyecto de Transición Ecológica y Digital (TED), coordinado por el Grupo de Ingeniería Térmica y Sistemas Energéticos del I3A, de la Universidad de Zaragoza, creará una línea de trabajo para avanzar en la descarbonización del sector energético mediante el almacenamiento inteligente de energía térmica (STES4D), que se desarrollará en tres subproyectos de la Universidad del País Vasco, el centro de investigación CIEMAT y la Universidad de Zaragoza.
El objetivo del proyecto es contribuir al despliegue de sistemas de almacenamiento de energía térmica (TES) que sean capaces de gestionar el calor y el frío para ahorrar energía. Por ejemplo, si se pudiera almacenar directamente el calor del sol para utilizarlo también en forma de calor no haría falta transformarlo en electricidad, logrando una mayor eficiencia con menor coste.
Con una duración de dos años, el proyecto STES4D pretende reducir las emisiones de CO2 y el consumo de recursos fósiles, aumentando la integración de fuentes renovables en la producción y gestión de la energía. El objetivo es aprovechar recursos como la energía solar o el calor residual de las industrias para así evitar usar la caldera y tener que quemar gas natural.
Evaluación del impacto ambiental
Uno de los puntos fuertes en el que trabajarán los investigadores del I3A será evaluar el impacto ambiental de este almacenamiento de energía térmica. Analizarán el ciclo de vida de los sistemas para detectar cuál es su efecto en el medio ambiente.
El grupo de investigación GITSE ya trabaja en la poligeneración, es decir utilizar un mismo recurso, para producir varias demandas como puede ser el calor, el frío, la electricidad o el agua, y reducir así las emisiones de CO2 para ser más eficientes.
En colaboraciones previas con la Agencia Internacional de la Energía, detectaron una serie de puntos críticos que impedían un desarrollo pleno de los sistemas de almacenamiento térmico, por lo que aprovecharon la convocatoria del proyecto TED para investigar y mitigarlos.
Entre estos puntos, se encuentra la parte de materiales, liderada por el CIEMAT, el sistema de almacenamiento de energía térmica, a cargo de la Universidad del País Vasco, y la integración del almacenamiento en el sistema energético coordinado por el grupo GITSE del I3A. Además, cuentan con la participación de grupos de investigación de Suiza, Dinamarca y Brasil.