El Índice de Precios de Consumo (IPC) publicado esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE) incorpora novedades metodológicas que mejoran la calidad del indicador y lo adecúan a la normativa de la Unión Europea. Se trata de cambios relevantes en la medición del IPC, para los que ha sido preciso un desarrollo específico tras la implantación del cambio de base el año pasado. Uno de estos cambios se refiere a la ampliación de la cobertura del sector energético, en concreto de los mercados de la electricidad y del gas, con la incorporación de la parte relativa al mercado libre de ambos sectores.
Para llevar a cabo la ampliación de la cobertura del mercado libre de la electricidad y del gas ha sido preciso realizar un proceso de adaptación de la información sobre precios del mercado libre de ambos sectores para hacerla compatible con las exigencias metodológicas del IPC.
Mercado libre de la electricidad y del gas
Dos de los principales elementos que componen el sector energético en el IPC son la electricidad y el gas. En ambos, las tarifas consideradas hasta ahora para el cálculo del indicador se referían exclusivamente al mercado regulado. Sin embargo, debido a los cambios sucedidos en el sector energético en los últimos años, se ha considerado necesario incorporar el mercado libre para representar adecuadamente la evolución de los precios del sector.
Esta ampliación de la cobertura no se pudo llevar a cabo en 2022 debido a que no se disponía de la información con el suficiente nivel de detalle, ni con los criterios técnicos necesarios que permitieran aplicar una metodología consistente con los requerimientos exigidos en el cálculo del IPC. A lo largo del año pasado fue necesario que las principales compañías distribuidoras adaptaran sus sistemas de procesamiento de la información para responder a las exigencias metodológicas del IPC.
Finalmente se consiguió disponer de la información necesaria, lo que permite ahora incorporar los mercados libres de la electricidad y el gas en el cálculo del IPC con plenas garantías.
La incorporación de los mercados libres de la electricidad y el gas en el cálculo del IPC cuenta con el respaldo de Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea.
Otros cambios relevantes en la medición del IPC
Además de la inclusión del mercado libre de la electricidad y del gas, se han llevado a cabo otros dos cambios. El segundo cambio metodológico afecta a la estructura de las ponderaciones. A partir de este año la fuente principal utilizada para el cálculo de las mismas pasa a ser la Contabilidad Nacional (CN), en lugar de la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) como hasta ahora. De esta forma, el IPC se adapta a los criterios establecidos por la reglamentación europea, que fija el año 2023 para su entrada en vigor.
Por otro lado, el tercer cambio metodológico está relacionado con el procedimiento utilizado para la realización de la encuesta. Se trata de la recolección de los precios por medio de dispositivos electrónicos, un cambio que se hará efectivo a lo largo de 2023 y que simplifica el proceso de obtención de información y permite agilizar el procesamiento de la misma.