El proyecto Charge, desarrollado entre enero de 2019 y diciembre de 2023 en la región británica de Manweb (Cheshire, Merseyside, North Shropshire y norte y centro de Gales), ha creado una nueva herramienta para identificar de forma rápida las mejores ubicaciones para instalar puntos de recarga públicos para vehículos eléctricos (VE). Asimismo, ha investigado cómo la red eléctrica local puede adaptarse de manera efectiva a una mayor demanda de carga.
SP Energy Networks -operador de la red de distribución y transmisión en el centro y sur de Escocia, el norte de Gales, Merseyside, Cheshire y North Shropshire- ha liderado el proyecto Charge, en el que también han participado PTV Group, Smarter Grid Solutions y EA Technology. Además, ha contado con la financiación de Ofgem, regulador de energía de Gran Bretaña.
Charge ha combinado datos de planificación de redes de transporte y electricidad para pronosticar dónde habrá una mayor demanda de recarga de vehículos eléctricos entre 2025 y 2050. También ha estudiado cómo podría utilizarse esta información para acelerar el despliegue de puntos de recarga públicos para convertir la movilidad eléctrica en una opción más realista para la ciudadanía.
Resultados del proyecto Charge
Entre los principales resultados del proyecto, se encuentra ConnectMore, una herramienta de planificación de conexiones autoservicio online que permite a autoridades locales, promotores inmobiliarios, propietarios y operadores de puntos de recarga identificar los mejores lugares para la instalación de infraestructura de carga.
ConnectMore consta de un mapa interactivo y una calculadora de costes que ilustra los patrones de transporte actuales y futuros, junto con la capacidad de la red eléctrica, determinando las mejores ubicaciones para los puntos de recarga y emitiendo un presupuesto inmediato para la conexión.
El proyecto Charge también ha identificado cómo los operadores de redes de distribución pueden utilizar las conexiones de carga inteligente para gestionar el consumo energético de los puntos de recarga públicos en tiempo real y mantener la demanda de electricidad dentro de los límites de capacidad de la red existente.
En este sentido, se han desarrollado nuevas metodologías para permitir que la infraestructura de recarga se conecte más rápido y sin necesidad de costosas actualizaciones de la red, maximizando así el uso de los activos de red existentes.