La Asociación de Operadores de Sistemas de Distribución Europeos (E.DSO) ha anunciado la disponibilidad del entregable D1.1: ‘Controladores externos’ del proyecto europeo FLOW. El documento analiza las condiciones marco, las barreras y las motivaciones que impulsan la electrificación en el sector del transporte con el fin de establecer un trasfondo de conocimiento común para el desarrollo de las soluciones FLOW.
El entregable profundiza en los marcos de políticas europeos y nacionales que impactan en la integración de vehículos y redes, al tiempo que describe las barreras, necesidades y motivaciones de las partes interesadas hacia la integración del sistema energético.
Asimismo, este documento describe a los usuarios de vehículos eléctricos con más detalle, incluidas las actitudes, demandas y percepciones de la carga inteligente, conceptos y conductores para la aceptación de sistemas de cobro bidireccionales. También, se presenta un mapa de stakeholders que ilustra el flujo de poder y servicios entre los actores, así como los productos clave que forman parte del dominio del proyecto.
Descarbonización de la movilidad
El objetivo marcado por el paquete ‘Fit for 55‘ de reducir a cero las emisiones de CO2 de los vehículos nuevos para 2035, que prohíbe la venta de nuevos vehículos híbridos o con motor de combustión interna, insta a la electrificación del sector del transporte y al despliegue de la infraestructura de carga de vehículos eléctricos necesaria.
Con la mayoría de los cargadores de vehículos eléctricos conectados a las redes de distribución, los Operadores de Sistemas de Distribución (DSO) desempeñan un papel clave en el logro de los objetivos de descarbonización de la UE y los requisitos establecidos por la Directiva de Infraestructura de Despliegue de Combustibles Alternativos (AFID).
En este contexto, el proyecto FLOW, liderado por el Instituto de Investigación en Energía de Cataluña (IREC), tiene como objetivo impulsar la integración óptima de los vehículos eléctricos mediante la promoción de un concepto de movilidad eléctrica centrado en el usuario que aporte beneficios al sistema energético europeo.
Para ello, FLOW validará y cuantificará los beneficios asociados con la flexibilidad de carga de vehículos eléctricos para aliviar los problemas de la red y lograr la descarbonización de la energía mientras se hace la transición a un modelo de movilidad sostenible.
El consorcio del proyecto se compone de 30 socios de nueve países de la UE, que cubren toda la cadena de valor, incluidos fabricantes de equipo original (OEM), proveedores de tecnología (CPO), agregadores, DSO, gestores de redes de transporte (TSO), desarrolladores de tecnología de la información (TIC), RTO expertos en usuarios, movilidad, armonización, herramientas de optimización, integración energética y aprovechamiento de las redes; asociaciones de electromovilidad y DSOs.