La Asociación de Operadores de Sistemas de Distribución Europeos (E.DSO) ha publicado el documento ‘Agenda E.DSO para inversiones estratégicas en redes’. E.DSO subraya la necesidad de potenciar las redes de distribución, vitales para conectar más del 85% de las energías renovables.
Este documento, que describe los compromisos clave alineados con la Unión Europea, busca inspirar a los responsables políticos, las partes interesadas de la industria y los clientes para priorizar la modernización de la red eléctrica.
Compromisos de E.DSO
El documento ‘Agenda E.DSO para inversiones estratégicas en redes’ expone los principales compromisos de la asociación europea de DSO E.DSO.
El primero de ellos se basa en empoderar a los operadores de sistemas de distribución (DSO) europeos. Se insta a reconocer el papel fundamental de los DSO en la configuración de la red energética a través de un diálogo industrial frecuente entre los formuladores de políticas y los principales DSO, así como la mayor participación de E.DSO en los debates políticos relacionados con la red de distribución y las inversiones.
Por otro lado, se subraya la importancia de elevar la inversión en redes en la UE. Se insta a la Comisión Europea a priorizar las medidas de inversión, incluyendo una mayor colaboración entre los DSO y las autoridades reguladoras, incentivos para inversiones proactivas en infraestructura para los DSO y políticas para impulsar la electrificación en los diferentes sectores, como transporte y calefacción.
Otro compromiso está relacionado con la dependencia de las tecnologías de red europeas. Desde E.DSO subrayan que la importancia de las tecnologías de red para impulsar los esfuerzos esenciales de refuerzo y expansión de la infraestructura física a nivel de distribución de Europa debe realzarse mediante el desarrollo y la fabricación de estas tecnologías dentro de Europa y la creación de un marco financiero resiliente para facilitar este esfuerzo.
Finalmente, el documento aboga por la renovación de la fuerza laboral. Según el documento, la UE necesita inversiones colaborativas, certificaciones reconocidas por la industria y el establecimiento de una Academia de Industria Net-Zero.