La Universidad de Colorado en Denver (CU Denver), EE.UU., dirige un estudio que analizará cómo la carga bidireccional puede ayudar a las empresas de servicios públicos y a los vecindarios, especialmente durante los cortes de energía.
Muchos expertos coinciden en que la actual infraestructura de la red eléctrica no es sostenible, debido a los impactos del cambio climático y al envejecimiento de la infraestructura energética. En base a este contexto, el nuevo estudio de la CU Denver está explorando los beneficios potenciales de incorporar vehículos eléctricos (VE) a la red para satisfacer mejor las necesidades energéticas modernas. De manera similar a los residentes de hogares que funcionan con energía solar pueden generar electricidad adicional y venderla a las empresas de servicios públicos, se podría establecer una red de carga bidireccional tan amplia para que los propietarios de vehículos eléctricos transfieran energía de regreso a la red.
Este sistema de integración entre vehículos y red (VGI) podría ser especialmente eficaz durante cortes de energía y desastres naturales, cuando grandes poblaciones necesitan energía de inmediato.
El estudio, que cuenta con una duración de tres años y una financiación de 750.000 dólares, espera mostrar a los líderes gubernamentales y a las empresas de servicios públicos que existen aún más opciones para respaldar una red saludable y reducir las emisiones de carbono. Los estudiantes de posgrado también participarán en la investigación.
Áreas interdisciplinarias en las que se basará el estudio
En concreto, el estudio se centrará en cuatro áreas interdisciplinarias. La primera será la economía experimental, mediante desarrollos de modelos de precios en horas pico y valle que los consumidores y las empresas de servicios públicos apoyarían.
La segunda área se centra en el impacto en los edificios y la red, que evaluará cómo la carga bidireccional afecta a la estabilidad de la red y a la eficiencia energética de los edificios, con el objetivo general de reducir las emisiones y los costos.
Otra área es el comportamiento del consumidor. Se intentará comprender cómo todos los ciudadanos pueden beneficiarse de VGI, cómo superar posibles barreras socioeconómicas y cómo las lecciones aprendidas pueden integrarse en el transporte y la planificación urbana.
Por último, el análisis de datos. Los investigadores examinarán los hallazgos de los primeros tres puntos y utilizarán algoritmos de aprendizaje automático para identificar ubicaciones de cargadores públicos y estrategias de precios que serían ventajosas para los propietarios de vehículos eléctricos y las empresas de energía.
Plan de red de carga de vehículos eléctricos
Según los investigadores, la idea es presentar un plan de red de carga de vehículos eléctricos en una caja. La red de carga pública debe expandirse rápidamente en al menos 140.000 puertos de carga rápida para dar servicio a los 26,4 millones de vehículos eléctricos proyectados en las carreteras para 2030, según un informe reciente del Edison Electric Institute.
Si bien solo un puñado de modelos de vehículos eléctricos actuales tienen carga bidireccional incorporada, según los investigadores, la demanda del mercado por esta característica probablemente la hará más estándar en los próximos años.