Entre los años 2002 y 2022 las solicitudes de patentes para tecnologías eólicas marinas han aumentado en promedio un 18% en el mundo. Este crecimiento se estancó entre 2014 y 2017 pero, en los últimos años, ha sido testigo de un fuerte aumento de las solicitudes. Así se desprende de un nuevo estudio conjunto publicado por la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena) y la Oficina Europea de Patentes (EPO), que evalúa las estadísticas de patentes para revelar las tendencias tecnológicas más recientes que se han estado produciendo en la industria eólica marina.
La alta producción de energía de la tecnología marina y su capacidad de desarrollarse rápidamente a escala de gigavatios hacen de la energía eólica marina una opción valiosa y rentable para proporcionar electricidad a zonas costeras densamente pobladas. La innovación es clave para desarrollar nuevas bases para turbinas lejos de la costa o impulsar el acoplamiento del sector.
El informe sobre patentes de energía eólica marina subraya que la capacidad eólica marina tendría que alcanzar casi 500 GW en 2030 a nivel mundial, 14 veces más que en 2020, para mantener al alcance el objetivo de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 °C establecido en el Acuerdo de París. Por su parte, la capacidad mundial de energía renovable debe triplicarse de aquí a 2030.
Según las estadísticas de Irena, en 2022 se instaló en todo el mundo un acumulado de 63 GW de capacidad eólica marina, y el coste nivelado de la electricidad (LCOE) generada a partir de energía eólica marina cayó un 59% en el período 2010-2022. A pesar de estos avances positivos, el informe destaca que la comunidad internacional requiere más innovación y acción para garantizar que la capacidad global de energía eólica marina alcance 494 GW y 2.465 GW para 2030 y 2050, respectivamente, de conformidad con el escenario de 1,5 °C de Irena
Tendencias en la innovación de energía eólica marina
El nuevo estudio analiza la evolución de las solicitudes de patentes en los últimos 20 años y destaca varias tendencias. Entre otras cuestiones, el documento refleja que la innovación en el sector eólico marino está impulsada en gran medida por actores de Europa y Asia, y Estados Unidos emerge como un mercado de futuro.
En el ranking de los diez primeros países con familias de patentes internacionales (IPF) presentadas, siete países son europeos, con Alemania y Dinamarca a la cabeza. Entre las familias que no pertenecen a IPF, China es, con diferencia, el país líder que demuestra su fuerte mercado extraterritorial local.
Por otro lado, el estudio indica que, a lo largo de la cadena de suministro de energía eólica marina, la mayor actividad de invención se ha producido en cimentaciones flotantes, capacidades logísticas y el potencial para respaldar la producción de hidrógeno verde. La mayoría de las invenciones para la energía eólica marina se centran en tres áreas: cimientos flotantes, equipos de transporte y la instalación y montaje de turbinas.
Además, otra tendencia destacada en el informe se basa en que los sistemas eólicos marinos están explorando cada vez más vías para fortalecer su almacenamiento de energía y/o producción de hidrógeno para equilibrar los sistemas energéticos y crear valor adicional. Se hace hincapié en promover la flexibilidad en los sistemas energéticos y los datos de patentes revelan el creciente interés por integrar opciones de almacenamiento de energía en los parques eólicos marinos, especialmente aquellos con capacidades de producción de hidrógeno, para acelerar aún más las actividades de descarbonización.
El estudio concluye que la comunidad internacional se encuentra en un punto de inflexión con respecto al progreso de la transición energética. Aunque las solicitudes de patentes para tecnologías eólicas marinas han mostrado un fuerte aumento, el informe subraya que se necesitarán innovaciones importantes y sostenidas junto con un marco regulatorio complementario para aumentar las capacidades mundiales y garantizar su contribución efectiva a limitar el calentamiento global a 1,5 °C.