La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha aprobado una resolución por la que se establecen, a propuesta de Red Eléctrica, las condiciones y requisitos para un proyecto de demostración regulatorio de control de tensión. El objetivo es alinear el factor de potencia de la demanda con las necesidades del sistema, mediante un ajuste en los incentivos que reciben los grandes consumidores a través de los peajes. Se trata del segundo sandbox regulatorio de la CNMC relacionado con el control de la tensión en las redes eléctricas.
La Directiva (UE) 2019/944 del Parlamento Europeo y del Consejo de 5 de junio de 2019, sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad, identifica el control de la tensión como un servicio de no frecuencia, del que los gestores de las redes deben proveerse mediante procedimientos transparentes, no discriminatorios y basados en mecanismos de mercado.
Dentro del proceso de rediseño del servicio de control de tensión para su adaptación a lo dispuesto por la Directiva, la CNMC publicó en 2022 un primer proyecto de demostración regulatoria, cuyo objetivo era poner a prueba un mecanismo de mercado de carácter zonal, abierto a todas las tecnologías de generación y demanda.
El desarrollo de ese primer proyecto entre enero y julio de 2023 permitió constatar la capacidad de la generación. Sin embargo, la demanda no encontró atractivo el proyecto, bien por su complejidad técnica o por la existencia de barreras, como los peajes o la falta de certidumbre en la retribución que lleva asociado cualquier mecanismo de mercado.
Para encontrar una fórmula alternativa que permita aprovechar el potencial de la demanda, se lanza ahora un segundo proyecto focalizado en los incentivos que aportan los peajes en materia de facturación por energía reactiva. La duración del proyecto se estima entre un mínimo de tres y máximo de 12 meses, aunque podría ser prorrogada en función de los resultados que se obtengan.
Participación en el segundo sandbox regulatorio
La participación en el segundo proyecto es voluntaria y está abierta a todos los consumidores conectados a la red de transporte o a la red de distribución sujetos a los peajes 6.3 y 6.4 establecidos en la Circular 3/2020. Está previsto que el proyecto pueda ampliarse posteriormente a los consumidores sujetos a los peajes 6.2 y 6.1.
La participación en el proyecto compromete a los consumidores a mantener un factor de potencia inductivo. Por contrapartida, estos consumidores verán suspendida la penalización del término de reactiva del peaje y, adicionalmente, percibirán una retribución por la energía reactiva consumida.
En casos particulares, se prevé que el operador del sistema pueda requerir un factor de potencia específico a ciertos consumidores con capacidad para aportarlo, lo que llevaría asociada una mayor retribución.
Como promotor del proyecto, el operador del sistema será el responsable de gestionar la tramitación de las solicitudes de adhesión, operar los intercambios de información que resulten necesarios, validar el cumplimiento y liquidar el servicio. Todo ello en coordinación con los gestores de la red de distribución.
Los resultados obtenidos (potencial de respuesta de la demanda) podrán ser tenidos en cuenta en una posterior revisión de la Circular 3/2020 de peajes, así como en el diseño del servicio de no frecuencia de control de tensión.