La 28ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), celebrada en Dubái del 30 de noviembre al 12 de diciembre, ha concluido con un acuerdo histórico de 198 partes para lograr una nueva era de acción climática. Las partes acordaron un texto llamado ‘El Consenso de los EAU’, que incluye un nuevo objetivo específico para triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética para 2030. Además, insta a las partes a abandonar los combustibles fósiles para alcanzar el cero neto, las alienta a presentar Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional para toda la economía, y genera impulso hacia una nueva arquitectura para el financiamiento climático.
Tras dos semanas de intensas negociaciones, la COP28 se cerró el 13 de diciembre con un acuerdo que señala el “principio del fin” de la era de los combustibles fósiles, sentando las bases para una transición rápida, justa y equitativa, respaldada por profundos recortes de emisiones y una mayor financiación.
Se insta a las partes a tomar medidas para lograr, a escala global, triplicar la capacidad de energía renovable y duplicar las mejoras en la eficiencia energética para 2030, además de acelerar los esfuerzos hacia la eliminación gradual de la energía a base de carbón, la eliminación gradual de ineficientes subsidios a los combustibles fósiles, y otras medidas que impulsen la transición para alejarse de los combustibles fósiles en los sistemas energéticos, de manera justa, ordenada y equitativa.
Energías renovables y eficiencia energética
Los principales compromisos contenidos en el texto negociado final incluyen una referencia a la transición hacia el abandono de todos los combustibles fósiles para permitir que el mundo alcance el cero neto para 2050, y un nuevo objetivo específico para triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética de aquí a 2030.
Los compromisos alcanzados también se basan en dar un paso adelante importante en las expectativas para la próxima ronda de Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) al alentar objetivos de reducción de emisiones para toda la economía; generar impulso detrás de la agenda de reforma de la arquitectura financiera, reconociendo el papel de las agencias de calificación crediticia por primera vez y pidiendo una ampliación del financiamiento en condiciones concesionales y de donaciones; y reconocer la necesidad de aumentar significativamente el financiamiento para la adaptación más allá de la duplicación para satisfacer las necesidades urgentes y cambiantes.
Agenda de Acción de la COP28
Para lograr resultados más allá del texto negociado, la Presidencia de la COP28 ha tomado medidas a lo largo de 2023 a través de su ‘Agenda de Acción’ que abarca cuatro pilares: acelerar una transición energética justa y ordenada; arreglar el financiamiento climático para hacerlo más disponible, asequible y accesible; centrarse en las personas, la naturaleza, las vidas y los medios de subsistencia; y fomentar la plena inclusión en la acción climática.
Entre los principales logros de la Agenda de Acción, destaca el Acelerador de Descarbonización Global (GDA), una serie de iniciativas energéticas históricas en los sectores público y privado para acelerar la transición energética, que incluye el Compromiso Global de Energías Renovables y Eficiencia Energética de triplicar la capacidad de generación de energía renovable instalada en todo el mundo a al menos 11.000 GW y duplicar la tasa anual promedio global de mejoras de eficiencia energética a más del 4% para 2030, algo que ha sido respaldado por 132 países.
También incluye la Carta de Descarbonización del Petróleo y el Gas (OGDC), que compromete a los signatarios a cero emisiones de metano y a poner fin a la quema rutinaria para 2030, y a operaciones netas cero a más tardar en 2050. Hasta la fecha, se han adherido 52 empresas, que representan más del 40% de la producción mundial de petróleo.