A través de su grupo de investigación Tidop (Tecnologías de la Información para la Digitalización Inteligente de Objetos y Procesos), la Universidad de Salamanca participa en el proyecto europeo SharedH2-Sudoe, orientado a potenciar el hidrógeno verde en zonas rurales a través de diferentes proyectos piloto dirigidos a la generación y almacenamiento de hidrógeno renovable a pequeña escala a partir del aprovechamiento de excedentes de energía. El 21 de febrero se celebró el lanzamiento del proyecto en Burgos, un evento en el que se presentó el plan de acción para los primeros seis meses de trabajo.
La iniciativa de investigación tiene como objetivo principal promover y validar el hidrógeno renovable como fuente de energía alternativa para potenciar las zonas rurales estratégicas desarrollando nuevas actividades económicas sostenibles, al mismo tiempo que se reducen los impactos ambientales y se mejora la calidad de vida de sus habitantes.
Entre los objetivos específicos del proyecto se tratará de analizar el aprovechamiento de excedentes de energía solar y eólica para la generación de hidrógeno a pequeña escala, integrar la generación y almacenamiento de hidrógeno verde renovable en comunidades energéticas locales del territorio Sudoe, y poner en marcha de planes de acción en los territorios Sudoe para la implantación de soluciones de desarrollo económico y social basadas en la generación y aprovechamiento de hidrógeno verde en comunidades energéticas locales.
Liderado por el Instituto Tecnológico de Castilla y León, el consorcio investigador integra a organismos y empresas de España, Francia y Portugal y está cofinanciado por el Fondo de Desarrollo Regional (FEDER) a través del programa de cooperación transnacional Interreg Sudoe.
Proyectos piloto en el marco de SharedH2-Sudoe
En el marco del proyecto SharedH2-Sudoe, está prevista la puesta en marcha de tres proyectos piloto. En primer lugar, una comunidad energética, impulsada por el Ayuntamiento de Bembibre, con instalación de fotovoltaica para el autoconsumo del propio ayuntamiento, pymes y ciudadanía. En segundo lugar, una comunidad energética, impulsada por el Campus de Bidart de la Escuela de Ingeniería ESTIA, con una instalación fotovoltaica para alimentar una flota de bicicletas de hidrógeno.
En tercer y último lugar, los investigadores llevarán a cabo un laboratorio de pruebas para producir y utilizar hidrógeno en las regiones de Alto Alentejo y Leiria de Portugal, a partir de energía fotovoltaica y con uso en movilidad.
Asimismo, hasta finales de 2026, los socios del proyecto cooperarán para realizar un diagnóstico del sector del hidrógeno en todo el territorio de Portugal, España y sur de Francia, un estudio de comunidades energéticas, una plataforma para ajustar la demanda y el consumo para optimizar la energía de las instalaciones de energías renovables, sesiones de formación y, por último, un plan de transferencia a partir de las conclusiones de los proyectos piloto desarrollados.