Las tendencias actuales en el sistema eléctrico de la UE, junto con los objetivos climáticos y energéticos a medio y largo plazo, indican que las fuentes renovables proporcionarán la mayor parte del suministro eléctrico europeo de las próximas décadas, lo que indica la necesidad de incorporar soluciones de flexibilidad en el sistema eléctrico para la integración renovable. En este contexto, la asociación SolarPower Europe ha elaborado el estudio ‘Mission Solar 2040’, que analiza la interacción entre la energía fotovoltaica y la flexibilidad del sistema eléctrico de la UE, de cara a 2030 y 2040.
Algunos Estados miembros con niveles altos de penetración fotovoltaica están empezando a enfrentar problemas relacionados con la integración de la generación renovable en la red. Por ello, el informe de SolarPower Europe ha realizado simulaciones de inversión y operaciones horarias del sistema eléctrico de la UE durante un año completo, analizando así tres potenciales escenarios con niveles crecientes de energía solar fotovoltaica y soluciones de flexibilidad debido a la electrificación del sistema.
Los resultados del estudio destacan el papel fundamental de las soluciones de flexibilidad en un sistema eléctrico caracterizado por una fuerte penetración de la generación renovable. Así, los expertos de SolarPower Europe señalan que aprovechar el potencial de flexibilidad no solo permitiría desplegar más energía solar, sino también realizar un mejor uso de la electricidad.
Recomendaciones políticas para la flexibilidad de la red eléctrica
En base a las conclusiones generales del informe, los investigadores han elaborado recomendaciones políticas que describen algunas acciones para apoyar el aumento de las inversiones en energías renovables y soluciones de flexibilidad de la red. En primer lugar, los expertos sugieren establecer objetivos políticos para las energías renovables y la flexibilidad de la red para 2030 y 2040. Liberar soluciones de flexibilidad permitiría un mayor despliegue fotovoltaico, según los expertos, lo que dará como resultado electricidad solar adicional en la combinación energética de la UE.
Por otro lado, a medida que las energías renovables crecen en todos los niveles de voltaje y la electrificación se acelera, ofreciendo un nuevo y alto potencial de flexibilidad, la planificación de la red es más importante que nunca. Por ello, la segunda recomendación recogida en el documento es mejorar las capacidades de los operadores, reguladores y formuladores de políticas en materia de planificación y evaluación del sistema energético.
La tercera recomendación de SolarPower Europe es liberar la inversión en flexibilidad de energía limpia en todo el sistema energético. Para ello, se debe impulsar la flexibilidad descentralizada mediante el desarrollo de centros energéticos locales y el fomento de los prosumidores, ofreciendo flexibilidad para gestionar la congestión de la red local. Por otro lado, indican que se debe impulsar la flexibilidad a gran escala invirtiendo en baterías independientes, así como en proyectos híbridos de energía solar y almacenamiento.
La cuarta y última recomendación recogida en el estudio ‘Mission Solar 2040’ es adoptar un Plan de Acción e Inversión en Electrificación de la UE. SolarPower Europe sugiere que este plan incluya un objetivo de electrificación directa de al menos el 35% de la demanda de energía final para 2030 en la UE, y al menos el 50% para 2040. Los expertos señalan que la importancia de este potencial plan de inversión reside en que los fondos europeos Next Generation y del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia previsiblemente se agotarán próximamente.