Un nuevo estudio de la Dirección General de Energía de la Comisión Europea recoge las mejores prácticas para la designación de áreas de aceleración de energías renovables (RAA, por sus siglas en inglés). En concreto, para instalaciones fotovoltaicas sobre suelo y flotantes, e instalaciones eólicas onshore y offshore.
El artículo 15c de la Directiva sobre energías renovables revisada obliga a los Estados miembros de la UE a ‘adoptar uno o más planes que designen […] zonas de aceleración de las energías renovables para uno o más tipos de fuentes de energía renovables’. La identificación de regiones óptimas para su designación como zonas de aceleración de energías renovables debe cumplir los requisitos establecidos en el artículo 15c(1)(a).
Este artículo indica que los Estados miembros deben priorizar determinados tipos de zonas con menor sensibilidad ambiental que reducen la probabilidad de posibles impactos, como las zonas artificiales o ya construidas. Además, excluye determinadas localizaciones como posibles zonas de conservación de la biodiversidad, dada la mayor probabilidad de impactos ambientales significativos en esas zonas, como las áreas protegidas u otras áreas sensibles a la biodiversidad.
Documentos para la planificación de instalaciones renovables
Tras la revisión de diversas fuentes científicas y las aportaciones de actores que participan en el proceso de planificación de las energías renovables en varios Estados miembros, el documento emite una serie de recomendaciones para llevar a cabo este proceso. El informe también analiza los impactos y las medidas de mitigación, centrándose en las zonas que serían adecuadas para la designación de zonas de conservación de la biodiversidad.
El objetivo de este documento es complementar la guía práctica para la designación de áreas de aceleración de energías renovables de la Comisión Europea, proporcionando más detalles y consideraciones relevantes para la designación de zonas de conservación de la biodiversidad.