Se ha inaugurado en la Región de Murcia el primer laboratorio para el apoyo a la formación de técnicos especialistas en tecnologías de hidrógeno verde. El objetivo es reforzar la formación y la potenciación del talento del sector como eje de la estrategia regional para impulsar la transición energética.
El laboratorio cuenta con un equipamiento didáctico de última generación que permitirá a los estudiantes la comprensión de la tecnología de las pilas de combustible. Asimismo, cuenta con un electrolizador y una botella recargable de hidruros metálicos, equipos suministrados por firmas de la Región de Murcia.
En estas instalaciones se programarán cursos y ponencias que permitirán acercar los sistemas de hidrógeno verde a los distintos profesionales de la región. Las formaciones abordarán una amplia variedad de temas técnicos y estratégicos sobre esta industria emergente, desde los procesos de producción a través de electrólisis, su almacenamiento y su distribución, a aspectos relacionados con la infraestructura tecnológica, el diseño y operación de electrolizadores, la seguridad y las tecnologías de celdas de combustible.
La formación será especialmente práctica, con casos aplicados en siderurgia, química y transporte pesado, donde ya se están desarrollando proyectos piloto.
Fuerza laboral en el sector del hidrógeno para la transición energética
El consejero Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor, Juan María Vázquez, junto al decano del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales de la Región de Murcia (COITIRM), Miguel Ángel Sola, inauguraron las instalaciones situadas en la sede colegial, en la que ya están formándose 60 estudiantes de la primera promoción en ‘Seguridad industrial y energética’. El gobierno autonómico ha destinado 158.000 euros para estas instalaciones.
Este laboratorio busca convertirse en una piedra angular para que la región se consolide como un punto estratégico en la producción y aplicación del hidrógeno verde. Así, permitirá avanzar en el conocimiento, desarrollo y aplicaciones industriales del hidrógeno y, además, generar las capacidades necesarias para liderar la transición energética en los próximos años.
Asimismo, tendrá un significativo impacto en el desarrollo del talento local y la adaptación de la fuerza laboral a los retos tecnológicos de la transición energética para que las empresas, ‘startups’ y pymes se beneficien de la disponibilidad de mano de obra entrenada específicamente en las tecnologías del hidrógeno, lo que fortalecerá su competitividad.