Que España y Portugal deben acelerar la descarbonización de su sistema eléctrico para convertir la Península Ibérica en un hub de referencia para la industria verde europea es el llamamiento que se realiza a través de un manifiesto lanzado por el Grupo Español para el Crecimiento Verde, que agrupa a más de 60 empresas, con el apoyo del think tank europeo independiente E3G.
El manifiesto se dirige a los gobiernos de España y Portugal, que se han reunido esta semana en la Cumbre Ibérica de Faro. El documento titulado ‘Hacia un sistema eléctrico hispano-portugués con cero emisiones netas: una oportunidad única para reindustrializar la Península Ibérica’ se ha enviado a las delegaciones de ambos países.
El texto propone que se establezca un objetivo común en materia de electrificación del sistema eléctrico ibérico que lleve a alcanzar las cero emisiones netas mucho antes de 2035, así como la fijación de objetivos de electrificación de la economía, en línea con las recomendaciones de la hoja de ruta hacia las cero emisiones netas de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) y el Acuerdo de París.
Apuesta por la electrificación de la Península Ibérica
El manifiesto identifica una serie de indicadores que ponen en valor los posibles retornos de una apuesta inequívoca por la electrificación de la península. Uno de ellos es la oportunidad histórica ante la que se encuentran España y Portugal, que podrían aumentar en un 25% sus exportaciones industriales, entre otras cuestiones, y la importancia de que la mayor proporción de energías renovables en el sistema eléctrico redunde en una creciente descarbonización de la economía en general, mediante la electrificación de nuevos consumos energéticos, en particular consumos industriales.
Además, el documento subraya que una estrecha colaboración entre España y Portugal facilitaría la transición energética, gracias a la planificación conjunta de sus infraestructuras y sus capacidades de almacenamiento de energía. Y también se invita a ambos países a desarrollar las señales regulatorias necesarias, en términos de planificación y de mercado, para acelerar tanto el despliegue de renovables como de soluciones electrificadas para diferentes usos y sectores.
El Grupo Español para el Crecimiento Verde concluye que España y Portugal están en una posición inmejorable para liderar la transformación hacia una economía verde en Europa. Aseguran que la descarbonización de ambos sistemas eléctricos antes de 2035 no solo es posible, sino necesaria para mantener el tejido industrial y atraer una nueva industria que sea al mismo tiempo competitiva, sostenible y generadora de empleo.
Impulso a las interconexiones energéticas
Uno de los asuntos tratados durante la XXXV Cumbre Hispano-Lusa, celebrada en la ciudad portuguesa de Faro esta semana, ha sido el de reforzar la competitividad entre España y Portugal para avanzar en una transición ecológica y digital justa contando con infraestructuras resilientes.
El Gobierno de España ha destacado que las interconexiones energéticas son fundamentales, y que el alto grado de integración entre los dos mercados energéticos, impulsados por el mercado ibérico de electricidad, aportan las condiciones para que la península Ibérica sea «un gran hub mundial de energías renovables». El Gobierno español ha hecho un llamamiento a seguir trabajando de manera conjunta para expandir y modernizar las interconexiones energéticas, así como para mejorar la conexión entre la península y el resto del continente con proyectos como el Corredor Ibérico del hidrógeno verde H2Med.
Cabe destacar que tanto España como Portugal han superado la cifra clave del 50% de electricidad producida a partir de fuentes renovables.