Para integrar de manera eficiente la creciente cantidad de energía renovable que ahora está entrando en funcionamiento, se deben tomar medidas inmediatas para implementar rápidamente tecnologías de almacenamiento de energía de larga duración (LDES). Así se afirma en el informe anual del Consejo de Almacenamiento de Energía de Larga Duración (LDES, por sus siglas en inglés). El informe exige que el LDES amplíe su cartera de implementación actual de 0,22 TW hasta un objetivo de 8 TW para 2040, un ritmo 50 veces superior al actual que será necesario para respaldar el desarrollo del mercado de soluciones LDES y la descarbonización de los sistemas energéticos mundiales.
El Consejo de Almacenamiento de Energía de Larga Duración aboga por un objetivo de almacenamiento de energía específico de 1,5 TW para 2030, que espera establecerse en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29) que se está llevando a cabo en Bakú, Azerbaiyán, hasta el 22 de noviembre. En la COP28 del año pasado, casi 200 países se comprometieron a alcanzar un objetivo global de capacidad renovable de 11 TW para 2030, triplicando la capacidad instalada actual.
El informe subraya que se necesita un objetivo de almacenamiento de energía para permitir el crecimiento rápido y continuo de las energías renovables variables y respaldar el objetivo de 11 TW.
Análisis del entorno político, regulatorio y de mercado
El informe anual del Consejo LDES ofrece una perspectiva actual y un análisis del entorno político, regulatorio y de mercado global para el almacenamiento de energía de larga duración, junto con datos actualizados y casos de uso de la industria.
Además, el informe identifica siete facilitadores esenciales para acelerar el despliegue, incluidos el apoyo de políticas, los marcos regulatorios, la financiación, los objetivos de capacidad específicos de los LDES y los incentivos del mercado. Y evalúa el progreso logrado por los mercados líderes en relación con estos facilitadores.
Beneficios del almacenamiento de energía de larga duración
El informe analiza los beneficios del almacenamiento de energía de larga duración, que abarca tecnologías que almacenan energía en diversas formas (electroquímica, mecánica, térmica y química) con una duración de descarga de ocho horas o más. Estos recursos retienen energía o calor durante períodos prolongados, que van desde horas hasta días, semanas o incluso estaciones.
Según el informe, los beneficios de ampliar el alcance de los sistemas LDES son enormes. Además de permitir la integración de una mayor proporción de energías renovables, los sistemas LDES reducen los costes del sistema energético al reducir las restricciones, postergar las inversiones en la red, mejorar la capacidad y aumentar la resiliencia de la red eléctrica.
Objetivo de 8 TW para 2040
El Consejo de Almacenamiento de Energía de Larga Duración estima que la implementación de hasta 8 TW de soluciones LDES para 2040 representa una oportunidad de inversión de 4 billones de dólares que podría generar hasta 540.000 millones de dólares en ahorros de costes del sistema al año.
Varios países tienen como objetivo a corto plazo lograr que más del 50% de su generación de electricidad provenga de energías renovables variables y necesitan de las tecnologías de almacenamiento de energía de larga duración para sostener una red eléctrica eficiente y confiable.
La Agencia Internacional de la Energía espera que para 2028, Chile, Dinamarca, Alemania, Grecia, Irlanda, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, España y el Reino Unido generen al menos el 50% de su electricidad a partir de EDL. Estos países –y otros, incluido Estados Unidos– aspiran a tener sistemas de energía de cero emisiones netas para 2035, lo que, según el informe, amplifica aún más la necesidad de desplegar las tecnologías de almacenamiento de energía de larga duración.