El Congreso ha aprobado extender hasta el final de este año la protección energética de los consumidores domésticos vulnerables, con la prohibición de interrumpir el suministro básico de energía y prolongando los niveles de descuento excepcional del bono social de electricidad. Las ayudas se prolongarán hasta el 31 de diciembre de 2025.

El Pleno del Congreso de los Diputados ha convalidado esta semana el Real Decreto-Ley 1/2025, de 28 de enero, por el que se aprueban medidas urgentes en materia económica, de transporte, de Seguridad Social, y para hacer frente a situaciones de vulnerabilidad. El título IV de la norma reúne medidas de apoyo a colectivos vulnerables, como es la garantía de suministro de energía y agua a consumidores en los que concurra la condición de consumidor vulnerable, vulnerable severo o en riesgo de exclusión social.
De esta manera, se extiende un año más, hasta el 31 de diciembre de 2025, la prohibición establecida en 2021 de interrumpir los suministros básicos de energía y agua a los consumidores considerados vulnerables, vulnerables severos o en riesgo de exclusión social.
Asimismo, se ha prolongado hasta final de año la situación de excepcionalidad del bono social de electricidad destinado a los consumidores vulnerables y vulnerables severos, que se reforzó para dar respuesta a la crisis energética provocada por la invasión de Ucrania.
Bono social de electricidad
Tras la nueva prórroga, con efectos hasta el 30 de junio de 2025, el descuento en la factura eléctrica correspondiente al consumidor vulnerable será del 50%; y en el caso del consumidor vulnerable severo será del 65%. Después, desde el 1 de julio de 2025 y hasta el 31 de diciembre de 2025, el descuento para el consumidor vulnerable será del 42,5%, y en el caso del consumidor vulnerable severo del 57,5%. A partir del 1 de enero de 2026, el descuento de los consumidores vulnerables se estabilizará en el 35% y el de los vulnerables severos en el 50%.
El último Consejo de Ministros de 2024 incluyó en un Real Decreto-ley la prórroga de varias medidas de protección de los consumidores vulnerables, que fue derogado por el Congreso. Tras su modificación, finalmente ha sido aprobado incluyendo medidas para la protección energética de consumidores vulnerables, aunque otras medidas en materia energética no se han incluido, como la prórroga del programa Moves III con ayudas a la adquisición de vehículos eléctricos e instalación de puntos de recarga.