Hasta el 4 de abril está abierto a audiencia e información pública la propuesta del Plan de Acción de las Materias Primas Minerales 2025-2029 que ha lanzado el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco). Entre otras medidas, se fomentará la industria de materias primas minerales de carácter estratégico para la transición energética y digital.

El plan tiene por objeto establecer las bases para la transformación de la industria de las materias primas minerales, en un contexto de economía circular, y garantizar el suministro de las materias primas minerales autóctonas en España de una manera más sostenible, eficiente, y que maximice los beneficios a lo largo de la cadena de valor.
La propuesta del Plan de Acción de las Materias Primas Minerales 2025-2029 está en sintonía con el reciente Reglamento de materias primas fundamentales de la Unión Europea (CRMA), así como con el nuevo Plan de Acción de Economía Circular actualmente en elaboración.
Hoja de ruta para la gestión de las materias primas minerales
Con horizonte 2050, la hoja de ruta para la gestión sostenible de las materias primas minerales prevé la elaboración de planes quinquenales para ajustarla a las estrategias, prioridades y evolución de los indicadores sectoriales, y materializar sus cuatro orientaciones estratégicas.
En primer lugar se buscará la eficiencia y la economía circular en las cadenas de valor del suministro de materias primas minerales, integrando y concretando para la industria extractiva los objetivos y líneas de actuación de la Estrategia España Circular 2030. En segundo lugar, se impulsará y consolidará la gestión sostenible de las materias primas minerales en la industria extractiva española.
En tercer lugar, se pondrá el foco en la seguridad de suministro y en el cumplimiento de los requisitos medioambientales, geoestratégicos y de justicia social en la importación de materias primas minerales. Y la cuarta orientación será fomentar la industria de materias primas minerales de carácter estratégico para la transición energética y digital, por su empleo en la implantación de energías renovables, baterías para vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento de energía a medio y largo plazo.
Más de 30 actuaciones prioritarias
El borrador sometido a audiencia e información pública se configura como el primero de los planes de acción contemplados en la hoja de ruta, en el marco temporal de 2025-2029. El plan contiene 38 actuaciones distribuidas en cuatro clasificaciones: regulatoria, sectorial, transversal y de impulso a la I+D+i, siendo posible que las actuaciones contemplen sinergias entre ellas.
Entre las medidas más relevantes destacan la elaboración de una nueva Ley de minas; la revisión del Real Decreto 975/2009 sobre la gestión de los residuos de las industrias extractivas; y la actualización del sistema de garantías financieras, asegurando la restauración ambiental a cargo de los titulares de las explotaciones. Y también es una medida prioritaria la recuperación de suelos y zonas afectadas por proyectos de minería anteriores.
Por otro lado, será prioritaria la promoción de los proyectos españoles relacionados con la seguridad de abastecimiento en el ámbito europeo para captar financiación comunitaria o el análisis de las barreras y obstáculos para la inversión de la industria sectorial.
Entre las demás actuaciones del plan, destaca el análisis en términos nacionales de las necesidades de materias primas minerales; el fomento de la I+D+i y el impulso de proyectos innovadores; el diseño de programas de capacitación, políticas de igualdad e inclusión, así como la difusión de la industria como una oportunidad para el empleo; la implantación de renovables como alternativas a la restauración de suelos; o el examen del impacto de la industria extractiva en la cohesión territorial en ámbitos rurales, desindustrializados o con declive demográfico.
Asimismo, el Miteco destaca otra medida prioritaria: la puesta en marcha del Programa Nacional de Exploración Minera 2025-2029, que actualizará el conocimiento sobre los recursos minerales del país, especialmente aquellos estratégicos como litio, níquel, cobalto y tierras raras. La última prospección de esta magnitud se realizó entre 1969 y 1970, por lo que esta iniciativa representa un avance clave en la exploración de recursos fundamentales.