Los BMS (Building Management Systems) o Sistemas de Gestión de Edificios facilitan una operación más eficiente de los recursos energéticos en edificios comerciales y residenciales, mejorando el uso eficiente de la energía y contribuyendo significativamente al ahorro energético. A través de la automatización y el control, los sistemas BMS optimizan el consumo energético, interactuando de forma inteligente con la red eléctrica.
En el marco de las Smart Grids, los sistemas de gestión de edificios adquieren una función estratégica, al permitir una gestión más flexible y dinámica de la demanda energética. Esto es posible gracias a tecnologías como IoT y Big Data, que facilitan la recolección y análisis de datos en tiempo real, permitiendo una respuesta automática y optimizada ante las fluctuaciones de la demanda eléctrica y las condiciones del mercado.
Además, los BMS juegan un papel crucial en el fomento de la eficiencia energética de los edificios, siendo capaces de gestionar de manera óptima sistemas de climatización, iluminación y otros servicios esenciales, ajustando su funcionamiento no sólo para maximizar la comodidad sino también para minimizar el consumo energético. De este modo, contribuyen a la transición energética hacia un modelo más sostenible.
La integración de recursos energéticos distribuidos, como la energía solar fotovoltaica, en combinación con sistemas BMS, permite además la creación de edificios autónomos desde el punto de vista energético, capaces de producir, almacenar y consumir su propia energía. Esto no solo reduce la dependencia de la red de distribución eléctrica tradicional, sino que también alivia su carga durante los picos de demanda.
Los BMS y su papel en las Smart Grids
Los BMS o Sistemas de Gestión de Edificios emergen como herramientas fundamentales, optimizando el consumo de energía y favoreciendo el ahorro energético. Su integración con tecnologías como IoT y Big Data facilita una gestión energética más dinámica y eficiente, promoviendo la eficiencia energética y soportando la transición hacia una energía más sostenible. La combinación de BMS con recursos energéticos distribuidos propicia, además, la autosuficiencia energética de los edificios, contribuyendo a la creación de un futuro energético más resiliente y menos dependiente de las infraestructuras convencionales.